A continuación os presento los encuentros previstos para el próximo mes de marzo:
ESPACIO DEDICADO AL CAMINO DEL AUTOCONOCIMIENTO Y LA CONCIENCIA, DONDE PODRÁS ENCONTRAR RESPUESTAS Y PAUTAS DE REFLEXIÓN SOBRE LAS INQUIETUDES ESPIRITUALES Y LA EXISTENCIA. UNA PUERTA ABIERTA A NUESTRO VERDADERO HOGAR.
domingo, 26 de febrero de 2017
miércoles, 22 de febrero de 2017
La individualidad, fruto del Todo
Son seres de pequeña estatura
pero de una gran pureza, amor y consciencia dispuesta a ser expresada para
todos aquellos que estén preparados y abiertos de corazón. Son un ejemplo para
los de “mayor estatura”, debido que en su momento, los “más altos”, se alejaron
de la Fuente de su esencia. Hoy quiero deciros unas palabras sobre los niños y
su presencia en nuestras vidas.
Cada vez hay más niños que
necesitan ayuda psicológica debido a su desmotivación, inquietud y falta de
concentración en todo aquello que está establecido y se quiere inculcar como
conocimiento para su mañana. ¿Conocimiento? ¿Mañana?
Los adultos, y la escuela,
están vertiendo una energía en estas almas puras para que integren un
alineamiento con la sociedad y todos los demás según lo ya establecido. Ellos,
los niños, sienten en su interior que todo aquello que reciben, o en gran
parte, no se corresponde con lo que sienten. Cierto es que necesitan un saber
convivir y vivir dentro de una energía que no se corresponde a la suya. Esta
obsesión social para hacer que estas almas dejen de ser ellas para formar parte
de su entorno, hace, y cada vez más a medida que van pasando los años, que
estos nuevos seres, que hace poco vinieron del Hogar de donde todos procedemos, se rebelen muchas veces, sin querer
ofender, pero reaccionan a lo que no es natural según la esencia que cada uno
es.
Su actitud empieza a cambiar.
Quieren a sus padres y quieren obedecerlos, pero cada vez se atreven más a ser
ellos mismos. Son puros, de un gran sentido común. Si algo no les gusta, lo
dejan, e incluso expresan su desacuerdo. Si algo no tiene que ver con lo que
sienten, dejan de poner atención y dejar que los otros sigan su proceso, pero
ellos están con su honestidad manifestada y queriendo en su vida lo mejor para
activar todo lo que sienten y poder manifestarse tal como son.
A pesar de todos los avances
producidos a nivel espiritual, en las almas que habitan este amado planeta, la
energía no siempre se corresponde con lo que estos seres de pequeña estatura
pero de un gran corazón, amor y consciencia, sienten y vibran. Esto hace que su
actitud ante la vida muestre una serie de síntomas que pueden llegar a
necesitar una ayuda psicológica o terapéutica, debido a su entorno, que, quizás,
no sea el más propicio para estar en paz y armonía. Con esto quiero decir que
en el seno de una familia puede haber una gran desarmonía o impotencia por
parte de los padres, o de uno de los dos, que no sepan cómo solucionar el
estado y la situación de su hijo o hija.
En un ambiente muy terrenal,
donde las posesiones y la sobrevaloración de la materia como aspecto primordial
en la vida, hace que los valores interiores de cada uno se deleguen a un
segundo término. Esto hace que los padres transmitan a sus hijos una actitud,
unas palabras y una “no dedicación adecuada” a sus hijos. Los pueden amar, pero
a veces se sienten impotentes para hacer que pueda ser un hijo o hija “normal”.
Toda anomalía individual es
fruto del Todo. Con este Todo me refiero al entorno del niño. Éste reacciona
según ve, siente y observa.
Cuando en su casa no recibe
la energía de paz, tranquilidad, comprensión, sentirse amado y atendido,
entonces puede reaccionar de la manera que lo hacen para reclamar la atención,
la comprensión o el amor que puede llegar a necesitar. No hay nada porque sí.
No hay niños malos. Todo tiene que ver con su entorno, con lo que él recibe y
percibe en él.
Actualmente hay más
psicólogos que tratan la sintomatología que los niños muestran, tanto en la
escuela como en sus casas. Niños hiperactivos, con una gran falta de atención y
concentración. Parece que estas almas sean problemáticas a los ojos de los
padres, los maestros y la sociedad. ¿Realmente es así? ¿Seguro?
No hay ningún síntoma que
alguien pueda llegar a mostrar que no tenga que ver con la relación de su
entorno o parte de él.
El síntoma individual tiene
que ver con la sintomatología del Todo. No podemos aislar lo que uno vive y
muestra como algo ajeno a todos. Todos estamos relacionados y unidos para un
mismo fin: llegar a nosotros mismos y recordar aquel quienes somos. ¿Cómo
podemos recordar si nuestro entorno está a años luz de lo que sentimos
interiormente? Un adulto consciente puede hacer frente a esta situación, pero
un niño, lo único que puede hacer es actuar con naturalidad según siente y
desinteresarse de todo aquello que no se corresponde con lo que él siente en su
interior. Este es un paso que lleva a un distanciamiento entre la manera de
actuar de los adultos de su entorno con él o ella. Se encierra en sí, mirando
de hacer lo que él siente.
Lo etiquetado como
problemático o no sociable en un niño, solo es el reflejo de lo que se vive en
su entorno. Su familia es pieza fundamental en el bienestar de estas almas
puras. La mayoría no sabe reaccionar con agresividad, solo si se le van
cortando sus alas una y otra vez, al final, como último recurso acudirá a una
actitud de llamar la atención.
No hay niños problemáticos,
sino un entorno enfermo, una sociedad enferma y no consciente que todavía
intenta imponer unas pautas obsoletas según los tiempos que vivimos, según la
energía que habita actualmente en nuestro planeta y en muchas almas ya
despiertas a lo largo de los cinco continentes.
¿Hay que tratar a los niños
como inadaptados o problemáticos? Bueno, la respuesta vendría a ser la
siguiente pregunta: ¿La sociedad y el entorno de esta alma pura y amorosa está
equilibrada, transmitiendo los valores de Unicidad, Comprensión, Respeto y Amor?
¿Están recibiendo una energía equilibrada por parte de quienes les rodean? La
verdadera “educación y despertar de la consciencia” la necesitan los adultos.
Tengamos presente estas
palabras, y entonces nos podremos dar cuenta que lo que le ocurre a un ser es
fruto de Todos, del Todo. Cuando el Todo está inestable, desarmonizado,
transmite a sus miembros un camino inestable e incomprensible para sus almas.
La reacción de cada uno de ellos puede ser, entonces, “anormal”, debido que lo
que ha recibido y le han querido establecer como pautas mentales, es ya
obsoleto e ineficaz en los tiempos que vivimos. Es anteponer la materia, antes
que el amor.
Síntomas como la falta de
atención y la hiperactividad, que se les etiqueta a los niños de la nueva era
(índigo y cristal), solo son la manera que estos niños nos están transmitiendo
que lo que están recibiendo no se corresponde con lo que ellos viven y sienten
para su mayor bien y el de todos.
Es normal que desconecten de
lo que se transmite en la escuela, porque la docencia está desfasada en relación
a cómo son los niños ahora. Se continúa transmitiendo unos conocimientos que
hacen formar a los niños a medias. Todo es mental, cuando los niños de ahora
viven exclusivamente desde el corazón. La escuela está desfasada con los niños
que ahora tenemos y van llegando a nuestro entorno. Es normal que no le pongan
atención. Yo tampoco atendería, al ver que no se corresponde con lo que yo
siento, no ayudándome en nada a llegar a ser yo, a conocerme y poder conectar
con todas las herramientas que cada uno lleva en su interior para poder
establecer la calma, el bienestar y poder llegar a sentir aquel quien en verdad
somos. El interior de los niños se ignora para establecer las maneras
convencionales de comportarse, estar en un lugar, qué decir o mejor callar. No
es esta la “educación” para los
tiempos que vivimos.
Cada vez más, se requiere ir
a nuestro interior, y no estar tan pendientes de nuestro exterior, y nuestros
niños, así nos lo transmiten con estas actitudes.
Es normal la hiperactividad.
Ellos necesitan de la libertad y el movimiento. Es a través del contacto
directo con la naturaleza y un medio de expansión, donde podemos llegar más a
ellos y hacer que se interesen por lo que les rodea y entiendan el por qué.
El fracaso escolar continua
siendo alto. Cuando no hay motivación e interés, se debería de plantear si lo
que se les está transmitiendo es lo adecuado o no. Pero ya sabéis que todavía
no está siendo así, queriendo imponer a los niños, como futuro de la humanidad,
una continuidad de lo caducado, el dolor, el victimismo y el sentirse impotente
para solucionar o sanar cualquier situación.
La escuela debería de
cambiar, y no la forma, sino el contenido de lo que debe transmitirse.
No hay niños problemáticos,
solo una familia, un entorno, una sociedad alejada del Amor y la Consciencia.
Soy parte de estos niños
etiquetados como antisociales o problemáticos. De pequeño consentí que mis alas
se recogieran, dejando de volar como sentía. Conseguí llegar, con los años, a
abrir mi corazón y sentir el amor. Delegué mi mente a mi Voluntad, siendo mi
Corazón la nueva guía en mi proceso. Así llegué hasta mi presente. Mis alas,
ahora, ya están abiertas, extendiéndose cada vez más, deleitándome con la
sensación de planear y elevarme, sintiendo la plenitud en mí.
Los niños reclaman lo que les
pertenece, y todavía hoy, en la mayoría de las veces, los adultos desoyen la
voz consciencial de estas almas despiertas y conscientes encarnadas en, de
momento, un cuerpo de pequeña estatura.
Escuchad a vuestros niños
porque elevarán vuestra alma. Son una bendición para nuestra alma y nuestro
proceso.
Observad cómo actúan y su
reacción ante la vida, porque aprenderéis en el silencio.
Abrazadles y haced que tenga
contactos con vuestras manos. Abrazadlos, besadles y acariciadles, porque activarán la
seguridad en ellos y la confianza al ver la naturalidad de vuestra expresión
hacia ellos y la calidez de vuestra presencia con ellos. Dadles apoyo. Cada vez
que acariciamos o abrazamos a un niño, abrimos las puertas para que esta alma
sienta que está siendo amada y le da confianza para abrirse y sentir la familia
dentro de él. Es como los cachorros de animales, donde el fregarse los cuerpos
y tener contacto entre ellos, les reafirma como raza, dándoles seguridad y
protección.
Escuchad sus palabras, porque
van más allá de lo cotidiano.
Respetadles y tenedlos
presente en las decisiones a tomar.
Procurad sentir su interior y
os daréis cuenta del Cielo aquí en la Tierra.
Dejad que el niño que hay en
vosotros se manifieste libremente.
Escuchad vuestro corazón que
él os dirá en todo momento el camino a seguir.
Que el Amor y la Paz sean en
todos vosotros.
miércoles, 15 de febrero de 2017
No llores amada alma
No os desesperéis porque aquello que vivís contiene la esencia de nuestro avance en nuestro proceso. A todos, un abrazo y que el Amor y la Paz sean en todos vosotros.
miércoles, 8 de febrero de 2017
Momentos de Yuca, el indio
Se encontraba Yuca, en la
cima del monte tocando su tambor. Sentado en contacto con la hierba de aquel
lugar y su tambor entre sus piernas cruzadas, sus manos hacían resonar la
melodía ancestral de la interiorización para conectar con sus ancestros y todos
aquellos seres que le acompañaban en su encarnación actual.
La melodía llegaba por todo
el valle y más allá de las aguas del río que la cruzaba.
Cuando se encontraba en estos
momentos de profunda conexión, las águilas dejaban sus nidos para planear por
encima de aquella fuente de luz. Alguna de ellas, incluso descendía junto a él
durante todo el tiempo que abarcaba los instantes de comunicación con el más
allá de la materia.
Yuca creaba estos instantes.
Eran momentos de encontrarse con su verdadera naturaleza y poder abrir las
puertas del lugar donde siempre había pertenecido, más allá de lo terrenal. Un
Hogar donde solo las almas pueden ir y estar.
Con sus ojos cerrados
continuaba haciendo sonar su tambor, como intermediario y creador del estado
adecuado para transcender su consciencia y elevarse, entrando en contacto con el estado interior
adecuado para poder encontrarse con su alma y todos los seres de Luz, toda la
hermandad celestial que vela, guía y protege nuestros pasos.
Con ellos, acompañándolo,
puede adentrarse en la sabiduría ancestral y universal. Nuestra alma india
empieza a sentir su esencia a niveles intensos. El Amor lo abraza, la Paz lo
viste, la Confianza y el dejarse ir y llevar por ellos le cogen de las manos
para acompañarlo dentro de la Luz donde podrá recibir los mensajes de los
Maestros y Tutores celestiales que están a su cargo desde su nacimiento en esta
vida. Todos ellos se alegran de verle y él, siente el respeto hacia su ser y la
alegría y gozo de sus hermanos de la luz por su camino y su vida.
Yuca siente. Yuca abre su
corazón y deja que este le hable. Son momentos muy íntimos con el mundo
espiritual, siendo para él, su verdadero mundo, su Hogar, donde siempre ha
pertenecido.
Su tambor continuaba
emitiendo las ondas, expandiéndose éstas, por el aire hasta llegar a las altas
esferas Vibracionales.
Nuestra amada alma estaba
siguiendo su proceso en esta vida, con sus aprendizajes, momentos para las
obras realizadas, emanadas desde su corazón, y dejando espacios, también, para
estar con los suyos, su familia y amistades.
Yuca era un ser amado por su
aldea. Era reconocido, incluso, por viajeros que en sus viajes debían de cruzar
aquel territorio. Era un ser querido por todos. A pesar de esto, él sentía que
de cuando en cuando debía de irradiar su energía y subir a la montaña para
entrar en contacto con aquel quien en verdad era.
Ahora se encontraba junto con
su tambor, y aunque eran sus manos quienes golpeaban aquel instrumento, no era
él quien lo hacía. Aquel quien en verdad era se encargaba de no parar el ritmo
místico mientras su alma se adentraba en el Hogar donde era bien recibido.
Esta vez, se adentró tanto en
su interior, que sus guías le llevaron ante la Luz Suprema que rige e ilumina
todo el Universo. Era una luz dorada y con tonos blanquecinos. Era una luz
intensa y amorosa. Así lo podía llegar a percibir. Sentía una pureza amorosa en
su interior ante esta presencia.
Le invitaron que se acercara
más a ella. Justo delante de su presencia, le hicieron parar.
-
No tengas
miedo – le dijeron quienes le acompañaban. ¡Siente! – le dijeron a
continuación.
En estos momentos sintió una
gran expansión en su interior, como si fuera el universo en él, liberado de
toda tensión, preocupación y una gran sensación de seguridad al estar allí.
Sabía que nada le ocurriría y estaba a salvo. Así lo sentía con una gran
seguridad y certeza. Él se dejó ir del todo, sabiendo que estaba siendo amado.
A continuación le dijeron:
-
¡Adelante!
– invitándole a entrar en esta Luz que se encontraba ante él y le hacía sentir
todo lo comentado.
Dio un paso y cruzó el umbral de
aquella luz. De repente vio a toda la Familia Celestial con él, así como a sus
ancestros que se le acercaban y sus parientes y seres amados que ya habían
transcendido la materia. Todos se le acercaron para estar con él. Allí sintió
una gran alegría y gozo por existir. Sintió el Amor real del Cielo. Todos
estaban allí con él. Toda la Familia unida nuevamente, pudiendo verlos allí con
él.
Yuca se emocionó tanto que
algunas de sus lágrimas se manifestaron en su curtida tez, lisa y suave a la
vez, como renovada por el estado que se encontraba.
Alguien con una energía más
poderosa e intensa se le acercó.
-
¡Mira!
– le dijo.
De repente, como si todo
sucediera en un instante, vio su amor irradiado por toda la Tierra, llegando a
cada ser que la habitaba, tanto humano, animal como vegetal. Todos recibían su
Amor. Veía como su camino se iba ensanchando hasta cruzar el gran mar y llegar
más allá de donde, en estos momentos se encontraba. Sus lágrimas continuaron
humedeciendo su cara por la gran ilusión y emoción de poder volar y llegar a
otras tierras necesitadas de su esencia.
Vio como
era bien recibido, sintiendo una gran familiaridad por todos los que le
recibían. Luego, elevó su mirada y vio a una gran águila de cabeza blanca
haciendo círculos encima de él. Con sus alas abiertas, extendidas para poder
planear con toda su majestuosidad, nuestro indio la observaba, sintiendo la omnipotencia
de su presencia. En su interior sentía una gran firmeza y seguridad, así como
una sensación de respeto y familiaridad a la vez.
Volvió a
bajar la mirada y se encontró en medio de una gran luz y rodeado de lo que
ahora conocemos como ángeles y en un segundo círculo, sus ancestros y almas
conocidas.
-
Llevas
tiempo aprendiendo el camino hacia nosotros – le comunicaron quienes con él
estaban. Ahora ha llegado tu hora, venerable y alegre alma, que transmitas el
camino a los demás para que también puedan venir a nosotros. Enséñales a
avanzar desde el corazón y poder llegar a su Hogar, como tú has sabido abrirte
camino para llegar a saber de aquel quien eres. (Pausa). Deberás de enseñar el
camino hacia ellos, hacia el verdadero ser que son. Sus almas esperan su
despertar para unirse conscientemente a la Gran Familia, como tú ya has hecho.
(Pausa). Pronto sentirás la Gran Llamada desde tu corazón. Sabrás donde ir y
cómo hacerlo. Tus alas están preparadas para elevarte y dirigirte hacia el motivo
por el cual naciste.
De repente, Yuca sintió una
gran ilusión en su interior, así como una inmensa plenitud y convencimiento
pleno que así será y conseguirá llevar a término aquello por lo que encarnó su
alma. Sintió una gran emoción dentro de sí, sabiendo que aquello que había
recibido, así sería.
A continuación se encontró,
todavía sin abrir los ojos, tocando su tambor nuevamente. Controló sus toques
para dejarse llevar por cómo debía de hacer sonar su ya viejo compañero de
viaje.
Al cabo de un rato, se
decidió por abrir los ojos sintiendo esta paz y sensación de bienestar que
conlleva el hecho de haber estado en el Hogar.
Vio al águila aposentada
encima de una piedra, justo ante el precipicio que había ante ellos, apreciando
la belleza del paisaje que se divisaba hasta el horizonte. El día era claro y
luminoso.
Yuca hizo unas respiraciones
después de finalizar la melodía con su amigo el tambor. Se levantó y se dirigió
hacia la aldea, divisándola junto al río, al lado de unos árboles dejando un
claro en su centro, acariciado por los rayos del sol.
Descendió de la montaña,
sintiendo el amor, la serenidad, la paz y la alegría de saber que aquello que
ya llevaba percibiendo hace años, llegaría a ser realizado.
Yuca fue un alma entregada a
su corazón y al Gran Padre que rige el Universo. Su Amor fue irradiado tal como
se le permitió sentir y ver.
Fue una Luz para nuestra
amada Tierra.
lunes, 6 de febrero de 2017
miércoles, 1 de febrero de 2017
Encuentro con su Divinidad
Una vez, un alma consciente,
sintiendo su esencia quiso tener unos momentos para estar con su Divinidad.
Sintió el Amor en él, y empezó a sentir los síntomas de estar conectado con
aquel quien era.
Estando en este estado de
expansión y apertura, dejó que todo fluyera en relación a este encuentro.
-
Tiempo tardé en llegar a saber de ti – empezó
diciendo. Ahora, sabiendo de ti en mí, que el Amor sea mi acompañante en todo
mi proceso.
-
Aquel que abre su corazón y encuentra al ser que
es, sabrá de mí, de él, en todo momento.
-
¿Quieres decir que tú eres nosotros?
-
La Divinidad, como decís, no es algo ajeno a
vosotros, sino, aquel quien sois.
-
…
-
No soy algo externo a cada uno de vosotros, sino
la esencia de vuestra existencia. No busquéis una explicación a lo dicho,
porque vuestra mente no la va a encontrar. Id a vuestro corazón y obtendréis la
comprensión y el sentido de mi presencia en cada uno de vosotros, pero no
porque sea algo aparte de vosotros, sino porque vosotros sois Yo y Yo soy cada
uno de vosotros.
-
…
-
Vuestro proceso os ha llevado a la desconexión
para poder dar los pasos hacia aquel quien sois. Todo tiene su sentido. Una
oruga ignora, en un principio su capacidad de volar, pero con el tiempo, se da
cuenta que la transformación que vive, la lleva a mostrar toda su belleza y
resplandor. Así sois cada una de las almas encarnadas en esta dimensión. Empezáis
a saber de algo diferente y relacionado con vosotros, pero esta “diferencia” en
relación con la humanidad, resulta ser vuestra verdadera esencia y potencial
para llegar a vosotros mismos, a mí.
-
Si somos divinidad, ¿por qué no mostramos este
potencial que conlleva el ser un Dios encarnado?
-
Debido a vuestra consciencia. Es la consciencia
que os lleva a encontrar y experimentar con vuestro potencial. Volver a
recordar quienes sois os llevará a la elevación de vuestra alma, y este proceso
de ascensión, os permitirá cruzar el umbral de lo espiritual, que es de donde
pertenecéis. Vuestro presente os ha confundido hasta que habéis empezado a
liberar vuestras creencias mentales. (Pausa). Id a vuestro corazón que él os
hablará y os hará ver el sentido de vuestra existencia y el motivo por el cual
estáis donde estáis.
-
¿Llegará el día que llegaremos a mostrar, de una
manera clara y notable nuestras capacidades divinas?
-
Algunos de vosotros ya lo estáis haciendo. Dejad
que yo pueda manifestarme en vosotros, y entonces, el humano dejará lugar al
ser divino que es.
-
¿Cómo hacer para dejarte manifestar a través
nuestro? – expresó el alma.
-
Recordad quien sois, y cuanto más recordéis, más
podréis llegar a sentirme. Cuanto más me sintáis, más os daréis cuenta del Amor
que sois. Cuanto más Amor sintáis en vuestro interior y de una manera continua,
entonces, habrá llegado el momento que cederéis vuestro control de la vida a
mis manos para que pueda yo guiarla, llevarla y manifestarme libremente a
través vuestro. (Pausa). Llegará el día que os dejaréis ir, y entonces, vuestra
vida cambiará y empezaréis a notar como os irá sonriendo, como decís, cada vez
más, sin esfuerzo. Para llegar a aquí, deberéis de dejar de controlar vuestra
vida, teniendo la Fe correspondiente conforme todo está siendo para vuestro
mayor bien. (Pausa). Escuchad a vuestro corazón que él os guiará en vuestro
proceso hacia vosotros mismos,… hacia mí.
-
Es decir, que debemos de dejar de vivir desde la
mente y empezar a escuchar a nuestro corazón, viviendo desde él y dirigirnos y
llevar a término aquello que nos diga, que sintamos en nuestro interior.
-
Será un buen principio. Os ayudará a abrir las
puertas de vuestra liberación y permitir que la Gran Voluntad sea en vosotros.
¡No queráis que las cosas sean según vosotros, sino según lo que habéis venido
a hacer!
-
Entiendo, pues, que la vida no nos pertenece – comentó
el alma.
-
Pero sois responsables, y los únicos
responsables de vuestra vida. La parte que debéis de aportar, siguiendo vuestro
corazón, os llevará a la Divinidad que sois. ¡No temed! ¡Confiad! y liberaros
del afán de querer controlar lo que vivís. Aprended de ello porque elevará
vuestro ser. ¡Aceptadlo!
-
Sé de ti –dijo el alma, ¿pero cómo puedo
transmitir este Amor a los demás? ¿Cómo hacer llegar a los demás la consciencia
de quiénes son?
-
Siendo sencillamente tú. Escucha a tu corazón
que él te dirá. No queráis llegar a los demás, porque serán los demás que os
llegarán. Aquello que se encuentre en vuestro camino consciente, lo atraeréis,
no deberéis de irlo a buscar ni querer que los demás sean o se encuentren
interiormente como vosotros queráis.
-
…
-
¡Sé tú! Sintiendo quien eres, ayudaréis a todos
aquellos que estén dispuestos a abrirse y llegar a mí. Es con el ejemplo que
irradiaréis vuestra esencia y la sabiduría del sentido de vivir. (Pausa). Dejad
que yo os guíe. Sentid quienes sois y los umbrales de vuestra ascensión se
iluminarán, dejando de ser vosotros, para ser Yo.
-
…
-
Tú y Yo somos Uno. Tú eres Yo y yo siempre he
sido tú. Recuerda aquel quien eres, y siente el Amor en ti. Allí, en tu interior
me encontrarás. Siempre estoy. Yo Soy aquel quien tú eres. Deja que mi
presencia alivie tu alma y tu vida. Yo Soy Tú, y Tú eres Yo.
-
Que se haga tu Voluntad en mí – dijo el alma
finalizando el encuentro.
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