El Rincón de la Voz del Corazón
ESPACIO DEDICADO AL CAMINO DEL AUTOCONOCIMIENTO Y LA CONCIENCIA, DONDE PODRÁS ENCONTRAR RESPUESTAS Y PAUTAS DE REFLEXIÓN SOBRE LAS INQUIETUDES ESPIRITUALES Y LA EXISTENCIA. UNA PUERTA ABIERTA A NUESTRO VERDADERO HOGAR.
miércoles, 14 de mayo de 2025
domingo, 11 de mayo de 2025
jueves, 8 de mayo de 2025
No temas amado ser
No importa los miedos que puedas llegar a tener.
No importa qué miedos tienes y su intensidad. Todo miedo es fruto de la no
comprensión y conocimiento de lo desconocido o del resultado a obtener. El
miedo solo es fruto del pasado, perteneciente a la mente, no del presente.
El corazón protege tu ser al escucharlo y
sentirlo. Cuando ponemos la atención a la voz de nuestro interior, a nuestro
corazón, nada debemos de temer, porque lo que puedas llegar a percibir “ver o
sentir” pertenece al presente, y éste no anticipa las posibles “irregularidades
o anomalías posibles” que pueden llegar a acontecer. Tu mente sí.
Los miedos pertenecen a un pasado vivido desde la
falta de aplicación de tu empoderamiento. Cuando llegas al presente, traes contigo
el lastre de tu pasado, y éste, te pronostica lo que “seguramente” te sucederá,
teniendo en cuenta lo vivido en su tiempo. Tú eras de una manera y las
circunstancias otras. Tu mente quiere hacerte ver que siempre es lo mismo y así
será, sin tener en cuenta que el individuo va cambiando y las circunstancias,
como el planeta, también. Ahora no es el ayer. El ayer no será el futuro. Tú
eres presente, y lo que fue en antaño ya no tiene cabida en el ahora.
Los miedos adquiridos fueron el fruto de un no conocimiento
como ser.
El miedo desaparece con la comprensión espiritual.
El no conocerse implica una actitud de víctima,
debido que el aprendizaje de generaciones tras generaciones sobre “las
limitaciones” del ser humano dejaron huella en nuestro ADN. ¿Realmente éramos
seres limitados en el momento de adquirir el miedo? ¿Hubiese servido de algo el
tener el conocimiento sobre uno mismo al encontrarse con la situación? ¿Hubiese
servido de algo?
El ser humano está cambiando debido a la toma de
consciencia espiritual que va adquiriendo parte de la humanidad. Este cambio de
consciencia hace cambiar (elevar) las energías de cada uno y el planeta. Es
como un bálsamo de empoderamiento para todo aquel que se predisponga a abrir su
corazón y adentrarse en su interior para conectar con su verdadera esencia y el
verdadero mundo al cual pertenece.
En el presente, todos los miedos son ficticios,
ilusorios, debido a la aprehensión sobre un posible resultado a obtener no
deseado. ¿Es esta la mejor actitud a mostrar para nuestro ser? ¿Dónde se
encuentra el Amor ante una predisposición de esta índole? Sencillamente, no
existe. Cuando dejamos que el ficticio miedo en nuestro presente se manifieste,
estamos delegando nuestra esencia amorosa al cubo del olvido. Cuando hay temor
en nuestra vida, no hay amor, y si dejamos que el amor se manifieste, entonces
no hay temor.
Los miedos son una falta de amor hacia nosotros
mismos. A más miedos, más desconocimiento hay de nuestro ser. Nuestro potencial
espiritual está enterrado por decisión propia con los cimientos de un pasado
inexistente en el presente, pero que insistimos que prevalezca. Es una actitud
conocida, aunque dolorosa, y por lo tanto, “familiar”. Lo familiar lo
aceptamos, aunque no sea siempre lo correcto y amoroso. ¿Dónde se encuentra tu
responsabilidad ante la vida en situaciones como éstas? Sencillamente,
escondida en algún armario del pasado.
El no saber de uno, nos confunde a veces.
El no saber nos limita.
Cuando sabemos, entonces viene la comprensión y el
empoderamiento.
Los miedos desaparecen con la comprensión
espiritual.
Sabiendo quien eres tú, abrirás las puertas de tu
realización y la manifestación del Dios que hay en ti.
Tu divinidad llama a tu puerta para ser mostrada y
expresada en tu vida.
Ha llegado la hora que los dioses humanos cumplan
con el Gran Plan Superior establecido para este rincón del universo de nombre
Tierra.
La liberación de los miedos permitirá elevar las
almas de los seres humanos que están viviendo una experiencia en la materia.
Despertemos nuestra conciencia y dejemos que el
Dios que somos se manifieste majestuosamente al mundo.
Nada debemos de temer, porque nada puede con
nuestra divinidad. Somos Dios en la forma.
A mayor comprensión espiritual mayor grado de
evolución de nuestra alma.
Aquello que fue, ya no tiene porque ser ni será,
porque tu capacidad de decisión en el presente puede abrir tu corazón,
escucharlo y darte cuenta que nada debes de temer.
Sólo existe el Amor. Sólo existes tú con tu
divinidad. Deja que se manifieste y ábrete a la vida, a todo, a todos, al Hogar del cual perteneces, que siempre
ha estado a tu lado, aunque lo hayas olvidado y desoído su guía.
Tu verdadero ser espera el momento para volverse a
manifestar como cuando todavía no te encontrabas en la forma.
El Amor permite que
Tú eres Amor y Luz.
Deja que tu corazón te guíe.
Todo va bien. Todo está bien.
Te bendigo, amada divinidad, con mi Amor.
Que el Amor y