Incluso aquellos que van avanzando en su camino, se
encuentran con momentos donde parece que la tierra se abra, produciéndose una
notable grieta donde el avanzar a nuestro ritmo finaliza para vivir lo
inesperado. Es entonces cuando lo aprendido empieza a tomar forma para que lo
apliquemos en este presente nuestro donde las cosas, quizás, no sean como nos
gustaría.
Bienvenido seáis a este acontecimiento inesperado en vuestra
vida. La parte como discípulo de nuestro ser, se detiene y observa todas sus
reacciones, posiblemente de enfado, enojo, infravaloración, abandono, sentirse
ignorada…en fin, pueden aparecer toda una serie de sensaciones en nosotros que
pueden, incluso sorprendernos al tenerlas, porque inicialmente no es lo que uno
quiere. Debido a este suceso, puede que haya en alguna relación concreta, o con
todos los que te rodean, una distancia para que cada miembro influenciado pueda
tomarse su tiempo y consultar con su interior.
Una vez un discípulo le preguntó a su maestro:
-
Maestro, ¿por qué estos altibajos de cuando en
cuando?
El sabio miró a su discípulo y le respondió:
-
Como bien sabes, no es la primera vez. Dime,
¿qué has aprendido de los otros momentos vividos?
El discípulo guardó unos momentos de silencio para poder
responder a su mentor.
De repente
expresó:
-
Que todo puede resolverse y volver a la paz.
-
¿Y?
-
Que aquello en que me centro se muestra ante mí.
-
¿Entonces? – le preguntó el maestro
-
Tiene su sentido lo sucedido, siendo yo el
creador de estos momentos.
-
Por lo tanto,….
-
Por lo tanto, cada vez que vuelvo a encontrarme
con situaciones de este tipo es que todavía no tengo sanado los aspectos que
ello conllevan.
Después de un silencio, continuó diciendo:
-
Entonces, ¿qué puedo hacer yo para que no vuelva
a suceder maestro?
-
Aceptación, Aprendizaje y manifestar tu Esencia
– finalizó diciendo el mentor.
El discípulo se tomó su tiempo. Recordó otros momentos
parecidos y pudo sentir en su interior los aspectos esenciales de cada
situación vivida otras veces, viendo como los síntomas que provocaron cada una de
las vivencias eran los mismos.
En momentos que os sintáis incomprendidos o enojados, id a vuestro
interior y podréis sentir y percibir aquello de vosotros que necesita una
atención y amor por vuestra parte para sanar los aspectos que podrán crear
situaciones de malestar en vuestra vida, bien sea en la familia, la pareja, las
amistades o el trabajo.
Todo lo que nos sucede procede de nuestro interior, siendo
ahora una oportunidad para hacer las paces con vosotros mismos y llevar una relación
con vuestro entorno lleno de paz, estable y amor. Solo así podréis vivir en este
mundo esperando vuestra reacción para poder, todos los demás, continuar con su
proceso, siendo vosotros, un espejo donde mirarse, y dándoles el coraje para
continuar con su camino acordado antes de su encarnación.
Recordad las palabras del maestro: Aceptación, Aprendizaje y
manifestar vuestra Esencia.
Aceptación, Aprendizaje y mostrar al verdadero ser que sois,
vuestra Esencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario