Una vez un maestro preguntó a los asistentes que se encontraban con él:
- ¿Cómo definiríais los tiempos que estáis viviendo?
Después de un breve silencio alguien levantó la mano, y después del maestro señalarlo, el discípulo dijo:
- Parece que el mundo cada vez esté peor por todo lo que está sucediendo a nivel mundial.
- Cuesta adaptarse a él, pareciendo que te dé la espalda constantemente – dijo otro asistente del grupo.
- No siempre te sientes integrado en él – dijo un tercero.
- A menudo parece que te cierren todas las puertas para poder llegar a obtener aquello que sientes en ti – añadió otro.
Después de un breve silencio, el maestro respondió:
- ¿No os dais cuenta que vuestra presencia aquí donde os encontráis os ha permitido ver y comprender parte de la vida que vivís? Antes no asististeis a este grupo donde ahora os encontráis. Vuestras semillas han necesitado ser regadas por el agua pura de la vida. Sin ella, no hubierais llegado hasta donde habéis llegado. Cada vez sois más los que sentís venir aquí donde ahora os encontráis. Lo vivido os ha llevado a este presente donde empezáis a ir a vuestro interior y escuchar la voz de vuestra esencia. Los tiempos están cambiando, y este cambio que se está realizando ha sido gracias a los que antes que vosotros, asistieron aquí donde sentados estáis ahora. (Pausa). Depende de lo que uno realiza permite abrir las puertas de todos aquellos que le rodean, por lo tanto, la vida que empezáis a sentir dentro de cada uno, es fruto de otros que también hicieron lo que vosotros ahora hacéis. No es cuestión de vivir inmerso en el entorno que os rodea, sino en conectar con aquel quien en verdad sois. No es cuestión de vivir según lo establecido, sino según lo que sentís. Los que en su momento decidieron venir a un grupo como el vuestro, han sido los que han permitido que vosotros ahora estéis aquí. Vuestra energía es la que riega vuestras relaciones y vuestro mundo exterior. Vuestra presencia permitirá cruzar el umbral de las puertas abiertas debido a los cambios interiores que se están produciendo en todos los que asistís aquí. Este despertar en vosotros realiza unos cambios de energía que permite elevar las consciencias y las vibraciones de este mundo y de todos sus habitantes.
- Pero maestro – dijo interviniendo un discípulo -, ¿porque este mundo no se relaciona con nuestro interior?
- Para que todos, podáis sentir vuestro corazón y daros cuenta de la verdadera vida a seguir. Si no fuera así, uno continuaría viviendo según lo establecido en su entorno. Al no coincidir el mundo interior de uno con lo que se vive, hace ir al interior de nuestro ser para abrir las puertas de aquel quien en verdad sois. Cuando os manifestáis según vuestra esencia, entonces, estáis abriendo la fuente eterna para que los demás puedan beber de ella y sentir algo diferente en ellos que les haga elevar en su proceso, como vosotros lo estáis haciendo ahora. (Pausa).
- …
- Sentid quienes sois y este mundo continuará su proceso de ascensión. Vuestra presencia será la Luz para todos aquellos que os rodeen – dijo el maestro finalizando el encuentro.
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