Una de las
revelaciones que he ido adquiriendo a lo largo de los caminos tomados hasta mi
presente, es el de no ir a contracorriente de mi guía interior. Cada
contratiempo vivido y sentido me ha llevado a dar un paso más en este proceso
en el cual me encuentro. Poder vivir en la sencillez del sendero hacia ti te
facilita el avance hacia tu ser. Todo es muy sencillo y simple. Todo es fluir.
No hay adversidades ni obstáculos ante ti, sólo tu energía manifestada en la
forma de alguno de tus aspectos como ser en evolución. Cuando esta energía
interior se bloquea ante ti, aparece la forma para indicarte que tu andar no
procede según la dirección a seguir.
Todo lo vivido
no procede de un azar, sino de tu estado interior en el momento concreto donde
parece ser que la vida no te corresponde como a ti te gustaría.
Todo es
sencillez y simpleza. Todo es mucho más fácil de lo que puede llegarse a
pensar. Detrás de cada una de las situaciones vividas, solo existe el Amor,
para abrir tus ojos y poder ver el fondo de esta forma no querida, invitándote
a un aprendizaje para tu alma.
La vida es
nuestra aliada, porque no existe contrincante esperándonos en una esquina, sólo
nuestras resistencias y apegos a lo que fuimos, a aspectos de nuestro pasado.
Cuando nos liberamos de ellos, podemos percibir como nuestra existencia empieza
a sonreírnos y a sentirnos diferentes interiormente. Este nuevo estado interior
tiene que ver con perder los miedos a ser nosotros. El fluir está esperándote
para darte de la mano y acompañarte a lo acordado en los preludios de esta vida
actual.
¿Sabéis? No
existe el problema ni las dificultades, solo nuestra incapacidad de ser
nosotros. ¡No es que no podamos ser!, sino la presencia de nuestros apegos,
debido a las creencias y energías adquiridas desde nuestro exterior.
Aprendí a vivir confiando en el proceso.
Aprendí a
sentir el convencimiento firme conforme saldría de cualquier situación que
pudiera estar y mi voluntad no aceptaba.
No hay
complicación en nuestra vida, sólo los apegos a aquel quien nos hicieron por propia voluntad. Pudimos decir que
no aceptábamos lo impuesto, pero accedimos para poder llegar a nuestro presente
actual.
Dejar que la
sencillez y la simplicidad en tu camino sea la guía de tu ser, te llevará a
sentir el bienestar tan añorado a lo largo de los años. Fluir. Todo es sencillo
y simple. Todo es muy sencillo, y aquellos que sintáis Lemuria en vuestro
interior, sentiréis la pureza de la simplicidad de vuestra naturaleza. Sencillez.
Simplicidad. Corazón. Aceptación y Humildad.
Todo es
sencillo, incluso el poder entender nuestro proceso y todo lo experimentado en
el proceso del recordar. No se necesitan grandes palabras impresionantes. Nada
de eso se requiere. Más allá de toda situación hay una claridad y nitidez de
fondo cuando dejamos que nuestro corazón nos guíe.
Hablar con la
sencillez de lo que es una situación, un concepto, llega antes al corazón de
aquel que puede escuchar aquellas palabras. Los nombres o simbolismos pueden
crear una energía esotérica y de misterio, dando pie a un período ya obsoleto
en los tiempos actuales junto a una vanidad inconsciente, en algunos momentos.
Todo es muy
sencillo. La vida es sencilla y debe de ser transmitida desde esta sencillez
basada desde el corazón. Nos encontramos en tiempos de una gran elevación de la
vibración energética en el planeta y la humanidad (salto cuántico). Para transmitir el sentido de los tiempos actuales
no se requieren grandes palabras, ni elocuentes expresiones en forma de mantra,
pudiendo, así, llegar a todos aquellos que puedan estar escuchando estas
palabras. Para conectar con todos los
corazones y unirnos en una plena Unicidad Consciente y Sentida, debemos de
dejar que sea nuestro corazón el sherpa de nuestra ascensión, y cuando así es,
él no hace servir tecnicismos, ni símbolos idolatrados o palabras abstractas
que necesitan un larga explicación y retenerla mentalmente para su
entendimiento sin sentirla en nuestro interior.
Todo es
sencillo, claro, simple y sin misterios.
Para llegar a
ti, llegarás a través de la sencillez. Entonces entenderás sin esfuerzos.
Entonces lo sentirás y resonará en tu interior. Sentirás la serenidad dentro de
ti, en todo “ti”.
Cuando algo nos
reclama dar varios pasos basados en el exterior, pensad que os estáis alejando
de vuestra esencia. Algo no está yendo adecuadamente cuando necesitamos más y
más de nuestro exterior. “Algo no está
funcionando”.
Cuanto más
simples seamos en nuestra vida, más llegaremos a los demás y más, con nuestro
ejemplo, permitiremos que nuestra vida entre en una nueva etapa de serenidad,
claridad, tranquilidad, paz, armonía y amor. Es nuestra actitud la que complica
la vida y la bloquea, no la vida en sí. No es el azar existencial que me señala
con el dedo, sino mi interior vibrando a un nivel bajo por alejarnos de nuestro
verdadero ser. No somos complicados, siendo la vida muy dura. Nada de eso es.
Podríamos decir que “somos muy duros e
inflexibles con nosotros creando una vida muy complicada”.
Hablar con
sencillez, seguro que llegarás a todos los presentes y todos te entenderán.
Mostrando tu sencillez ante la vida, todos verán la humildad en ti y abrirás
sus corazones, llegándoles el mensaje que puedas llegar a transmitir.
Tu actitud en
el camino a seguir te llevará a la vanidad y a poner distancias, o a la comprensión
y aceptación de tu presencia allí donde estés. Tu actitud te acercará o te
alejará de aquel quien en verdad eres.
Lo importante
en nuestra vida, así como la sabiduría existencial, no se basa en grandes
titulares o palabras que desprenden “una gran
impresión haciéndote parecer un eterno discípulo”, sino en sentir el
empoderamiento en tu interior y tener una actitud de simpleza y sencillez ante
la vida. En ti encontrarás el entendimiento que tanto puedes anhelar. Tu
interior es sencillo, claro, nítido y simple. Sencillamente es; así pues,
dejemos a un lado la transmisión y la actitud de la vieja energía y abrámonos a
la nueva, donde lo humano (racional)
da paso a lo divino (crístico).
Para
conocernos, no necesitamos tener presente conceptos externos, sino sentir en
nosotros mismos la esencia de nuestra existencia, nuestra verdadera naturaleza.
Cuando la vida
se complica, es nuestra actitud y nuestro apego a aspectos de un pasado que se
manifiestan. Partiendo nuestras decisiones de unas raíces obsoletas y
bloqueadoras.
La vida no es
difícil. Somos nosotros que la pintamos en blanco y negro en vez de colores
diversos.
No hay nada que
proceda de nuestro exterior que no hayamos dado el consentimiento para
albergarlo en nuestro interior. Nosotros somos los únicos responsables de
nuestra vida y de todo lo que nos sucede en ella.
Ha llegado la
hora del fin de lo exterior en nosotros, para que lo interior dé paso a la
materialización de nuestro exterior. Es el fin de lo complejo para dar paso a
lo sencillo. La oscuridad da paso a la Luz.
No temas amada
alma. Todo es. Ya no hay lucha. Todo fluye.
Desde mi
corazón, que el Amor, la Paz y la Sencillez sean en cada uno de vosotros.
2 comentarios:
Jordi, como siempre que te leo tus palabras se "sienten"en el corazón... Gracias por esa sencillez tan elocuente ❤ me llega en su momento preciso y lo abrazo y agradezco.😊
Gracias por tus palabras, por compartir lo que sientes. Un abrazo Ma. Eugenia.
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