Amadas almas, el tema que queremos tratar hoy está
relacionado con vuestros niños y jóvenes. Queremos hablaros de lo que entendéis
como “Educación” en el mundo que
habitáis, y concretamente de los centros donde asisten para adquirir su “Educación”.
Algunos de vosotros ya empezáis a ser conscientes de lo que
representa una escuela actual para adquirir unos conocimientos y luego poderlos
aplicar en vuestro día a día. Permitidnos una metáfora: ¿Es lo adecuado plantar
en una maceta pequeña, un roble o una palmera para poder recoger los frutos tan
anhelados por vuestro ser? De alguna manera esto es lo que está sucediendo en
vuestra sociedad, para hacer que el niño o el joven, acaben con su motivación y
sus ansias de crear una vida según lo que sienten.
Os encontráis en una nueva energía, en un mundo donde ha
dado pasos de Ascensión esenciales para vuestro proceso evolutivo. Todo y así,
los centros de formación continúan basándose en el conocimiento intelectual,
olvidando al ser, al individuo.
Vuestros niños son almas viejas que han reencarnado para
ayudar a elevar la vibración de vuestro planeta y la de todos aquellos que le
rodean. Son almas que ya han vivido un proceso donde ha habido de superar
limitaciones y supuestas adversidades para poder venir nuevamente aquí en este
mundo. En su mayoría, sus consciencias son superiores a la de los adultos que
les rodean, incluidos sus propios padres.
Estos seres necesitan una formación diferente a cómo se les
han instruido hasta los tiempos actuales. La escuela de estos tiempos necesita
actualizarse y renovarse, debido que tal como está actuando, ya es obsoleta
para vuestro proceso evolutivo.
En la Nueva Escuela, para trascender los tiempos que vivís,
debe de realizarse unos cambios para que el individuo pueda manifestarse
plenamente a lo largo de su existencia. Esta Nueva Escuela debe de valorar a
todo el individuo completo y no solo a su parte intelectual.
Algunos de vosotros ya habéis dado algún paso en este
sentido, creando nuevas escuelas en contacto con la naturaleza, dejando los
patrones establecidos hasta el día de hoy para dar paso a unos centros donde
cada ser pueda encontrarse consigo mismo y ver, que todo aquel que se encuentre
a su lado, como alguien que es parte de
él.
Los nuevos niños que están viniendo en este mundo traen una
sabiduría espiritual y unas pautas de relación y expresión que deberíais
tenerlas en cuenta en vuestro día a día. Observar a los niños y podréis percibir en ellos la felicidad, la
alegría, la ilusión, la bondad, la pureza y la sonrisa constante, así como la
generosidad a los abrazos y del querer jugar para pasárselo bien. Para ellos,
el jugar tiene el significado de pasárselo bien, porque cuando juegan, son
ellos, se muestran tal como son y disfrutan de la vida.
Vosotros, amados adultos, deberíais de “jugar más”, y así hacer que
la vida tenga otro sentido que no sea el del esfuerzo y el de la impotencia en
gran parte de ella para muchos.
Cuando un niño dice que quiere jugar, os está diciendo que
la vida vale la pena vivirla y disfrutarla porque es una bendición. ¿Ya jugáis
vosotros? Vuestros niños son un reflejo de la Nueva Energía y la Nueva Tierra
empezando a plantar nuevas semillas a como se ha ido haciendo hasta ahora. Los
nuevos tiempos necesitan revisar algunos de los acontecimientos y maneras de
actuar para “actualizarlos” para que la nueva humanidad pueda mostrarse con
todo su resplandor. Tal como lo está haciendo hasta ahora, se encuentra en un
camino sin salida.
La escuela actual está valorando ante todo, el proceso
intelectual, mental, antes que otros más valiosos para la evolución de la nueva
humanidad. Gran parte de los conocimientos transmitidos se basan en potenciar
la mente. ¿Ahora entandéis por qué la sociedad donde habitáis se ha basado en
las clases sociales, el aceptar algo que a uno no le gusta, solo por obligación
(como puede ser la adquisición de un trabajo), y el poner vuestra atención,
solo en la forma y en el dinero? ¿Ahora lo entendéis? Todo es mental. Cuando la
finalidad de una escuela es transmitir unos conocimientos mentales, y aceptar
que el individuo lo ha entendido a través de unas pruebas escritas valoradas
según el criterio personal de quien se le denomina “maestro o profesor”. Cuando
en una escuela predomina los exámenes, las notas y los estudios de memorización
en exclusiva para poder hacer frente a una vida profesional y personal, quiere
decir que al individuo se le está limitando, sin darse cuenta, por no tenerlo
presente con toda su magnitud y potencial interior.
La escuela actual está limitando al individuo, lo está
bloqueando y adaptándolo a la sociedad en la cual vive. La escuela, tal como se
está haciendo, no permite evolucionar a todo el ser, sino solo a su parte
mental según unas creencias externas establecidas en la sociedad que vivís.
En la Nueva Escuela debería de tener presente y de incluir
todos estos aspectos no mentales que cada uno lleva en su interior. La Nueva
Escuela debería de ayudar al niño o al joven a encontrarse consigo mismo y que
cada uno decida qué hacer con su vida, no según lo establecido. Cada uno de
vosotros sois mucho más.
La Nueva Escuela tendría que estar en contacto con la
naturaleza, porque es aquí, donde los niños se encuentran bien, armonizados y
se puede utilizar su curiosidad para aprender y experimentar por ellos mismos
todo lo que hasta ahora se encuentra en un libro. La Nueva Escuela no se basa
en los libros, aunque puede haberlos, sino en la experimentación individual y
en contacto con la armonía de la naturaleza sintiendo su esencia por el hecho
de saber ir a su interior.
Ya existen nuevas escuelas donde estos aspectos empiezan a
llevarse a término. Todo y así, su contenido debería de revisarse para
introducir nuevos aspectos como esenciales para la formación de cada individuo.
¿Os acordáis del jugar que es una parte esencial de lo que
tendría que ser una Escuela? Pues bien, después de estar gran parte del día en
un centro escolar, ¿creéis que con unos solo 30 minutos de patio ya es
suficiente? ¿Qué significa “jugar”?: ¡Pasárselo bien!
Permitidme que también os recordemos otros aspectos de la
escuela actual, conforme necesita ésta, renovarse del todo, debido que el
sistema educativo actual, tal como se está haciendo, ya es obsoleta,
potenciando un tipo de sociedad que no
es armónica.
Habéis oído hablar de los niños hiperactivos y de falta de
atención, donde se les diagnóstica y se les hace un tratamiento debido que ven
que en la escuela tienen uno de estos dos síntomas o los dos. Solo se
diagnostican en la escuela actual, no en otros ambientes donde el niño puede
expresarse libremente. Entonces los destinan al psicólogo para que los trate.
Amados adultos, los niños no están enfermos. Su pureza y sus
ganas de vivir están reaccionando para hacer ver a la sociedad conforme esta
escuela que van no tiene ningún sentido para ellos. ¿Sabéis porque muestran
estos síntomas? Porque se aburren y no les interesa lo que están oyendo, porque
no tienen que ver con ellos. Ellos quieren que se les hable de ellos mismos y
de cómo utilizar todo el potencial que llevan consigo, y esto,…..no está
sucediendo, por lo tanto, centran su atención en otros aspectos. No es que
tengan una falta de atención, porque ésta está con ellos. Lo que sucede es que
no se centran en los contenidos transmitidos por el “maestro escolar” o lo que
leen, pero su atención continua dispuesta a ponerla allí donde puedan
reconocerse y darse cuenta que pueden aplicar todo un potencial innato. Por eso
se aburren, porque no tienen nada en común con los conocimientos transmitidos
un día y otro.
¿Hiperactividad? ¡Por supuesto! Si te están haciendo seguir
un ritmo que no es el tuyo, sentado en
una silla, con unas pautas que no concuerdan con tu interior, es normal que
sientas la necesidad de moverte y hacer algo que te haga sentir bien. El niño
quiere movimiento. Tiene las ganas de la curiosidad para aprender, pero le
están frenando estas ansias hacia el aprendizaje.
La escuela actual no tiene una salida para el ser espiritual
en este mundo de la forma. Os recordamos que todos sois seres espirituales
dentro de un cuerpo.
Los niños no están enfermos, lo que está enferma, es la
propia escuela. Debería de renovarse y tener más presente a sus asistentes. En
estos momentos, la escuela sigue su curso y la vida, cada niño o joven, el
suyo. Van en caminos diferentes, distantes uno
del otro. No hay un entendimiento para llegar a un acuerdo. La única
manera de acercarnos a nuestros niños es tenerlos presente y ayudarles a que
recuerden quiénes son y cómo utilizar todo su potencial innato para su vida. A
ellos les encanta experimentar, crear, y poder sentir sus estados interiores
innatos a su verdadera esencia. Luego, cada uno decidirá con su libre albedrío,
qué hacer en su propia vida sin seguir la rutina establecida como está siendo
hasta ahora.
Los niños no están enfermos. Cuando alguno se le ha diagnosticado uno de estos dos
síntomas nombrados anteriormente, a veces, para tratarlos, se les da
medicamentos que les hace bajar su energía y entonces es cuando rinden menos y
no pueden mostrar quienes son.
De ahí la importancia que todo el mundo adulto relacionado
con la escuela también reciba un reciclaje para llegar a entender mejor a los
niños y a las nuevas almas que irán llegando a lo largo del tiempo y requerirán una comprensión mayor por parte
de sus entornos para poder realizar su misión en los momentos que lleguen.
La escuela no debería de ser mental. Debería de incluir
otros aspectos relacionados con la esencia espiritual del ser. Hay escuelas,
donde algún maestro, a nivel individual, ya va incluyendo alguna práctica para
el bienestar interior de sus alumnos. La respiración, la meditación, el
percibir las energías a través de las manos, pueden ser pequeños detalles pero
que representan mucho más de lo que uno puede llegar a imaginarse. Si un niño
se da cuenta que puede solucionar por sí solo un estado inquietante, nervioso o
liberarse de un pequeño dolor físico que
pueda tener, entonces el niño o el joven, verá que la escuela tiene su sentido,
que está relacionado con su vida, no
como está siendo hasta ahora.
Los tiempos están cambiando, y lo que conocéis como escuela,
debe de hacer cambios esenciales en su contenido y aplicación, así como la
manera de transmitir y hacer que los asistentes puedan entender e integrar todo
lo que allí pueda llegarse a comunicar o experimentar.
La Escuela de la Nueva Energía, incluye parte mental, así
como espiritual. Cada vez más, se tendrán que ir aceptando las materias a dar basándose
en la espiritualidad, en la esencia innata de cada uno. Entonces, el niño y el
joven, podrán darse cuenta que son grandes seres al servicio de la humanidad. La
vida entonces, tomará otra dirección con resultados más en acorde a como
obtenéis hasta ahora.
Recordad que cuanto más seáis vosotros mismos, más la vida
os sonreirá. Sois parte de ella, y vuestra presencia está relacionada con la
Voluntad Superior.
Vuestro mundo se basa en la mente y cuando así es, todo es
subjetivo, y con el tiempo aparecen los intereses personales. Los niños de
ahora, y los que vendrán, no tienen intereses personales para salir
beneficiados a cuenta de otros. Los niños de ahora son puros y con el sentido
de la vida con todo su resplandor.
Ellos quieren JUGAR,
¿qué no os acordáis?
En la escuela actual no lo pueden hacer según su verdadera
esencia.
Os volvemos a recordar que la escuela actual está
diagnosticando a niños sanos, como enfermos, pero no son ellos, sino el
funcionamiento de la escuela donde van.
Los niños son seres perfectos, puros y llenos de bondad. No
hay maldad en ellos. Cuando un niño actúa de una manera diferente es porqué os
está transmitiendo que algo no está funcionando, bien en su entorno, o en él
mismo. Acercaros a él y hablar desde el corazón para que pueda expresar lo que
siente y saber qué es lo que le hace actuar de la manera que lo está haciendo.
Os recordamos que cuando se les diagnóstica alguno de los dos síntomas
nombrados anteriormente, es porque la escuela no tiene nada que ver con él. Se
aburre y centra su atención en otros aspectos que le permiten sentirse mejor. ¿Y
sabéis por qué?: porqué quieren ¡JUGAR!
En los nuevos tiempos que se avecinan deberéis de hacer
cambios notables para actualizar la formación y evolución de los nuevos niños,
teniendo presente que son y serán las semillas de la Nueva Humanidad.
Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros.
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