ESPACIO DEDICADO AL CAMINO DEL AUTOCONOCIMIENTO Y LA CONCIENCIA, DONDE PODRÁS ENCONTRAR RESPUESTAS Y PAUTAS DE REFLEXIÓN SOBRE LAS INQUIETUDES ESPIRITUALES Y LA EXISTENCIA. UNA PUERTA ABIERTA A NUESTRO VERDADERO HOGAR.
domingo, 30 de marzo de 2025
miércoles, 26 de marzo de 2025
La liberación del malestar
Una vez, un discípulo se
encontró con su maestro junto con la puesta de sol de aquel día. Cuando lo vio
le preguntó:
-
¿Maestro hay
alguna manera para que no te influencie todo lo que te rodea? A veces me siento
muy mal debido a lo que veo o se me dice según aquel quien me habla. ¿Cómo
puedo vivir en este mundo donde me encuentro y no afectarme todo lo que veo o
se me dice según la visión mental de la vida que uno puede llegar a tener?
El maestro lo escuchó.
Invitó a sentarse al discípulo en un banco que allí había. Cuando se hubo
sentado, entonces el maestro le dijo:
-
Aunque uno
quiera cambiar esta situación que puede estar viviendo, en el fondo, aquellos
que en ella se encuentran, continuarán haciendo lo que hasta ahora han ido
haciendo. No siempre aquellos que pueden sentir el malestar de lo que viven, y
dan pasos para liberarse de la baja vibración que comporta, ellos, los que le
rodean, continuarán haciendo lo que hasta entonces han ido haciendo. Quien
tiene que tomar una decisión eres tú – le dijo el maestro.
-
Pero yo no
hago nada mal, son ellos que ven en mi a alguien que no hace todo lo que ellos
dicen, encontrándome constantemente, detalles no ciertos, que me hacen sentir
mal y, según como, como a alguien que no sabe hacer nada bien. No se puede
vivir así. Me siento mal con estas situaciones – comentó el discípulo.
-
Quien ha de
cambiar eres tú, amado ser. En momentos como éste no debes de tener en cuenta
todo lo que te dicen o ves. Ellos continuarán haciendo lo suyo, y no te
aceptarán tal como tú eres. (Pauta). Por más que tú quieras cambiar estas
situaciones, no siempre se consigue, porque quienes deben de cambiar son
aquellos que quieren imponer o realizar algo que ellos creen que así ha de ser.
-
Entonces,
¿qué puedo hacer? – preguntó el discípulo.
-
Haz aquello
que sientas en tu interior, independientemente de lo que veas o se te quiera
imponer. Ellos continuarán igual, por lo tanto, siente tu interior y llévalo a
término. Al ser tú, ya no valorarás lo que se quiera imponer o tú puedas ver,
dándote cuenta que no se corresponde con la verdad de la vida.
-
….
-
Haz aquello
que sientas en ti. Esto te permitirá sentir el bienestar y aquel quien en
verdad eres. Tu Sentir te elevará, y cuando llegue su momento, irás
transmutando las energías que pueden estar rodeándote según el ambiente donde
te encuentres. Ellos, en estos momentos no cambiarán, por lo tanto, procura ser
tú y deja de valorar todo lo que puedan llegar a decirte. Siente la verdad en
tu interior, y al no centrarte en lo que no está siendo adecuadamente, te
permitirá sentir el bienestar y la paz dentro de ti. Al sentir la Paz de tu
interior, irás liberándote de las energías desprendidas por aquellos que te
rodean. Céntrate en ti y en cómo te sientes según tu esencia innata. Deja que
ellos sigan su proceso, y tú, sigue el tuyo. Siente la Paz y la Serenidad en
ti, entonces, te liberarás de estas energías para elevar a tu ser. No te
centres en ellas. Tú, siente tu interior y al verdadero ser que eres.
El discípulo se quedó
unos momentos en silencio como teniendo presente todo lo que se le había
transmitido. Hizo una respiración profunda, y al finalizarla, le dijo al maestro:
-
Gracias
maestro. Así lo haré.
Aquel discípulo fue
adquiriendo maestría a lo largo de los días y llevando a término lo recibido
por el maestro.
Al final, ya no tenía
presente lo que le decían o veía, sinceramente sentía su paz interior y el equilibrio
en él, independientemente de las energías de su entorno. Consiguió cambiar su
actitud ante aquella situación vivida, y pudo irse dando cuenta, como aquellos
que le rodeaban, cada vez le iban criticando e imponiendo menos, respectándole
un poco más.
En unas dos semanas ya
empezó a darse cuenta que su nueva presencia, su nueva actitud iba
transmutando, elevando las energías de aquellos con quienes se encontraba.
La Fuente de la vida se encuentra dentro de uno, en su interior. Sintiendo su corazón, y llevando a término aquello que le susurre, permitirá ir ascendiendo e ir elevando esta dimensión en la cual uno puede llegar a encontrarse en esta vida actual.
Que el Amor y la Paz sean
en ti.
lunes, 24 de marzo de 2025
jueves, 20 de marzo de 2025
Tiempos de espiritualidad
Los grandes cambios en uno mismo no dependen de aspectos de su exterior, sino de su interior. Cuando el ser vive desde su mundo interior, entonces, es cuando la puerta de su materialización y bienestar se abre para poderla cruzar. Cada ser no es material, terrenal, sino espiritual. Esta es la esencia innata que llevamos desde nuestro nacer en esta vida actual.
A todos, un buen abrazo.
lunes, 17 de marzo de 2025
Tu Presencia
Cada vez nos encontramos más en los tiempos donde nuestra presencia es la llave para elevar a nuestro planeta, en el cual nos encontramos. Nos encontramos en un ciclo de 11 años, donde empezó en el 2023 y finalizando en el 2033. A lo largo de este período los cambios que se van a producir en cada uno serán notables, los cuales nos llevarán a sentir cada vez más aquel quien en verdad somos. Hoy os dejo con: “Tu Presencia”. A todos, un buen abrazo.
jueves, 13 de marzo de 2025
lunes, 10 de marzo de 2025
Historia de una familia de orugas
Había una vez una familia
de orugas donde todo lo establecido se basaba en su condición de desplazarse
arrastrándose por el suelo. Esta era la visión que tenían de la vida.
Cuando una nueva oruga
aparecía en esta familia todos la animaban para que se adaptara a su situación
de avanzar lentamente, haciéndole saber que toda su vida estaría relacionada
con su aspecto físico y las limitaciones que esto comportaba y que debería
aceptar.
Una vez, hubo una oruga
que vio que todo lo que le transmitían de pequeña era limitado y no le
permitían llegar a ser ella misma. Llegó el momento que esta oruga sintió que
debía de separarse de su familia.
Una noche, mientras todas
ellas descansaban nuestra oruga empezó a desplazarse hacia otros lugares de
aquel bosque en que se encontraba. A lo largo de este desplazamiento, vio a
otros seres de animales que podían llegar a hacer otras cosas de lo impuesto
según su naturaleza animal.
Nuestra amada oruga, en
su momento vio un bello árbol el cual le hizo sentir que se subiera a él y
tuviera un contacto con todo su cuerpo. Empezó a subir lentamente, llegando a
una rama más alargada de lo normal que había visto hasta entonces. Siguió esta
rama hasta un punto donde sintió que debía de descansar. Estando allí, se colgó
de ella, relajando todo su cuerpo, quedándose adormecida y en paz con ella
misma. Así estuvo un tiempo, cuando llegó el día que percibió que lo que era su
cuerpo, ahora había cambiado. Sus numerosas patas habían desaparecido, convirtiendo
su ser en unas alas dobladas y de colores luminosos. Poco a poco fue intentando
salir de allí, de esta protección donde se encontraba.
Su imagen ya no era la
misma. Con la práctica fue dándose cuenta que podía mover estas alas y sentía
como si se elevara, pudiendo volar como no lo había hecho hasta entonces.
Por fin, con la práctica
del bateo de sus alas, pudo dejar aquella rama, y empezar una nueva etapa en su
vida.
Lo que sintió en el
primer vuelo, fue tan sorprendente, que percibió como si éste fuera su estado
natural. Sentía tanta conexión con la naturaleza, abrazada por la paz interior
que sentía y la gran luz que percibía ante sí pudiéndose dar cuenta que esta
luz le permitiría saber qué dirección tomar en cada momento.
Entonces decidió volver a
ver a su familia.
Cuando llegó a allí, pudo
percibir cómo todos sus familiares continuaban estando en un cuerpo de orugas.
Uno de ellos miró hacia arriba y vio como una maravillosa, bella y
resplandeciente mariposa se acercaba a ellas.
Deteniendo el vuelo a su
lado de esta oruga le dijo:
-
¡Hola, soy
yo! Soy tu hermana!
La oruga la miró y le
dijo:
-
Tú no eres
nuestra hermana. Nuestra hermana un día se fue y todavía no ha vuelto. No
sabemos nada de ella desde entonces.
-
El día que me
fui sentí que había de saber quien en verdad yo era. Dentro de mi percibía que
no era aquel ser que parecía ser. Al final pude darme cuenta del verdadero ser
que yo soy. La vida de esta nueva etapa que ahora me encuentro me ha permitido
darme cuenta de lo qué hacer y cómo llegar a mí misma. Vosotras, amadas
hermanas no sois quienes aparentáis ser. Vuestro cuerpo actual sólo es el medio
para aprender y daros cuenta que todas vosotras también podéis llegar a volar.
Sólo es cuestión de quererlo. Yo así lo quise y me encontré con unas
sensaciones no sentidas hasta entonces cuando todavía era una oruga. Ahora sé
que toda oruga puede elevarse con su vuelo interior para mostrar toda su
belleza y todo su resplandor.
La oruga que escuchaba lo
que su hermana le estaba diciendo hizo que sus ojos se humedecieran, a punto de
llorar. Al final así lo hizo.
-
Este lloro –
le dijo la mariposa – son tus inicios para desprenderte de tus limitaciones.
Todas vosotras podéis aprender a volar como yo lo llegué a percibir y a conseguirlo.
Ahora mi vida es de una libertad inmensa al darme cuenta de quien en verdad yo
era.
Poco a poco fueron acercándose más orugas de su familia al ver cómo una de ellas hablaba emocionada con una bella mariposa.
Vuestra familia sólo es
el medio para poder llegar a uno mismo, al darse cuenta del camino a seguir, o elegir
uno de nuevo. Esto es lo que hizo aquella oruga que se transformó en un
precioso ser que volaba y sentía el amor en él. Se transformó y manifestó en
aquel quien en era interiormente.
Muchas veces los miembros
de una familia no quieren aprender a volar y la mariposa se encuentra sola sin
una aceptación por parte de quien era su familia. Aceptadlos, porque cada uno está siguiendo su
proceso y llega a él cuando ya se encuentra preparado, como esta oruga que
recibió a la mariposa.
La familia es una puerta
abierta para saber del camino a seguir en tu proceso.
A todos les llega su
momento.
miércoles, 5 de marzo de 2025
domingo, 2 de marzo de 2025
La Palabra Innata
“La palabra es un reflejo de vuestro interior.
Lo que podáis llegar a expresar procede de vuestro estado actual en que os encontréis.
El sentido de la palabra en vuestro mundo es la voz de la esencia innata que cada uno es y posee en su interior.
Esa es la voz de vuestro corazón.
Cuando más os manifestéis desde vuestra Integridad, desde aquel quien en verdad sois, con un grado de consciencia elevado, más iréis manifestando la Luz, la Esperanza y el Amor procedentes de vuestro verdadero Hogar.
Más allá de lo establecido se encuentra la Verdad, y la Palabra es uno de los medios para dar a conocer aquel quien en verdad cada uno es y el camino a seguir.
La palabra es libre, procedente de la humildad y la sencillez.
Todo ser que ignore esta Luz y el Amor irradiado por el ser iluminado que transmite desde la Luz, hará que su vida actual se desvíe del sendero a seguir para llegar a él mismo.
La Palabra emanada desde el interior de cada uno, procedente de su esencia innata, le llevará a elevar la vibración de esta dimensión en la cual os encontráis, así como el liberar las almas de cada uno para que puedan manifestarse según lo establecido en el Gran Plan Divino.
Vuestra Palabra innata procede de la Divinidad que cada uno es.
Cuando la Palabra es mental, procede de la anulación del ser, habiendo adquirido como suyo lo establecido en su entorno dentro de esta dimensión terrenal en que os encontráis.
Más allá de toda Palabra se encuentra el Silencio que os llevará a vuestro interior, pudiendo percibir la puerta abierta que os permitirá llegar a manifestar aquel quien en verdad sois.
El Silencio es la puerta abierta que os llevará a vuestro verdadero Hogar, y a vuestra Familia Celestial.
Que el Amor y la Paz sean en cada uno de vosotros.”