miércoles, 27 de febrero de 2013

Y así fue


 



Y así fue como el lánguido instante de la esperanza me esperaba un paso más allá del mío para alentar a mi fortaleza no dejando espacio para el desaliento. Así fue como algo aparentemente ajeno en mí, me indicó el camino a seguir hasta el reposo de la liberación de mi ser a las manos de quien me creó.
Avanzaba sin dejar tiempo para el lloriqueo o murmullo de la lentitud, también aparente, de mi sendero. Me sentía atraído por una dirección según mi corazón. No sabía, sencillamente sentía que debía de continuar según mi interior me dictaba. Así llegué donde llegué.
Seguí los cauces de mi río existencial. En algún momento debía de aparecer el agua de la vida que daría sentido a todo lo que había hecho hasta el momento. Durante años vivía situaciones que sólo mi corazón sabía qué hacer. Su voz era fuerte y clara, y allí donde yo no podía escuchar, una fuerza sutil me empujaba a la toma de unas decisiones concretas. Al final, me daba cuenta, aunque no siempre, que lo realizado era lo correcto. Sin más.
La vereda del corazón es nítida, clara, directa y sencilla.  Allí donde yo no podía llegar, algo como ajeno a mí, me guiaba para la mejor decisión a tomar. Muchas veces era vivir lo que se encontraba ante mí, mientras que otras, sencillamente, dejarlo de lado y proseguir con mis pasos.
Me encuentro en la cima del último peldaño que he llegado. Veo la inmensidad de la creación, sintiendo la fuerza del verdadero ser que somos. La brisa desde lo más alto acaricia todo mi ser, sintiendo el silbido de la purificación en mí, así como la presencia del proceso seguido para sentir en mi interior la divinidad manifestada. Cuando se siente, todo es. Nada sobra.
Ahora me encuentro en medio de este estado viendo la extensión del paisaje que se divisa ante mí. Una sensación de bienestar inmenso, abrazado por el Amor del cual fui creado.
Más allá, también me veo. Estoy aquí, allí y ahí donde mi consciencia y visión interior puedan llegar a estar.
Veo como seres de luz van llegando donde me encuentro. Seres de apariencia angelical, tal como conocemos a los ángeles, y otras luminosidades van descendiendo allí donde me encuentro en estos momentos.
Juntos, en el silencio y con un gran abrazo multitudinario que abarca a todos los que hemos asistido a la cima de mi estado. Siento su amor y sus presencias activan la familiaridad del Hogar manifestado. Soy parte de ellos y ellos de mí. Otras entidades de luz también van apareciendo entre todos nosotros. Seres de una vibración superior, acogiendo mi ser como si fuera una pieza de gran valor para la consecución de la Voluntad Superior.
Aquí con ellos soy uno más. No hay distinción entre nosotros. Mi biología pudiera ser la gran diferencia, pero no es así. Mi esencia es una con las suyas. Somos seres, todos, emanados de una intencionalidad del amor. Mi cuerpo refleja el envoltorio para moverme por esta dimensión, pero estos encuentros con el Hogar, el cuerpo desaparece, siendo Uno y parejo, con todas las presencias de la Luz que me rodean.
Lo que siento es de una gran plenitud y bienestar. Sientes un Amor más allá de lo conocido, donde la plena Unicidad, comprensión, seguridad, protección, familiaridad, aceptación, abandono, obertura, Amor, guía, sabiduría, sencillez, pureza y una Luz que acoge sin deslumbrar te recuerdan de donde procedes. Cuando esto sientes y otras sensaciones intensas pero que solo puedas saberlas si las sientes porque no hay palabras que puedan describirlas; cuando todo esto lo sientes en tu corazón, y en cada rincón de tu interior, es que te encuentras en el Hogar.
Más allá de nuestra materia hay nuestra realidad, la esencia de quienes somos, aunque nuestro vehículo actual esconde nuestro verdadero ser. Abriendo la puerta del corazón podrás llegar a él, a ti. Entonces sabrás del Camino. Sólo hay Amor. Sólo hay Luz para iluminarte en tu avanzar. Lo aparente deja de ser, para dar paso a la verdad.
Ellos están aquí contigo y en todo momento que puedas llegar a necesitar una mano del Hogar. La Familia se reúne y acude cuando uno de sus miembros necesita su presencia. Abriendo el corazón y expresando tu intencionalidad de querer reencontrar el camino de vuelta, el Hogar se manifiesta y te asiste según tu alma necesita.
Escribo desde el Hogar para todas aquellas almas dispuestas a volver a él. Son los tiempos del retorno. Son los instantes anunciados que el Maestro vuelva a manifestarse ante el mundo.
Mis palabras son los sentimientos y sensaciones que experimento día a día con mis hermanos de la Luz. Más allá de mi materia estoy yo, abriendo mi propio camino para liberar los obstáculos que he ido arrastrando a lo largo de mis encarnaciones. Ahora, desde el punto donde me encuentro puedo deciros que todo lo que vivís no es lo que aparenta ser. Aquello que sentís es lo que se tiene en cuenta y lo que os hace reaccionar y actuar según sentís. Aquello que os apartó de vuestro camino, no es tal. Sencillamente se os dio una bendición para vuestra alma. Al aceptarla, superasteis lo que durante tiempo os negasteis a liberar.
El camino que habéis seguido es el reflejo de las oportunidades que el Hogar, allí de donde procedéis, os ofrece. Vuestra visión humana limitó la interpretación del verdadero sentido de lo vivido. Distorsionasteis la intencionalidad de quien os creó. Malinterpretasteis la ayuda que se os dio.
Muchos despertasteis y accedisteis a adentraros en la experiencia de los ofrecimientos. Algunos de vosotros no sabíais bien del por qué de aquello que vivisteis o todavía os encontráis. Vuestras limitaciones basadas en el miedo, fruto de la ignorancia existencial, os llevó a cerrar el corazón y distorsionar la realidad que vivís.
El Hogar está con vosotros y siempre así ha sido, porque nunca habéis dejado de pertenecer a él. Es ahora, con el cambio de consciencia en vuestra dimensión, que empezáis a discernir la realidad del sueño.
Vuestros ojos empiezan a abrirse, así como vuestros corazones y consciencias. Así ha de ser para recordar quienes sois y de donde procedéis.
Mi amor es Uno con el vuestro. Os rodeo con mis brazos y os aliento a seguir sin las limitaciones de los miedos. Estos, ya no tienen cabida en los tiempos actuales. La vida onírica en vuestra condición humana, ha llegado a su fin. Los tiempos del despertar existencial y del acercamiento con el Hogar son parte de las prioridades de los tiempos que vivís.
Os esperan nuevas vidas diferentes a la vuestra actual, pero para llegar a ellas, debéis de finalizar lo que habéis venido a realizar en vuestra dimensión. Ayudar a elevar las energías de vuestro planeta y vuestro ser, permitirán dar saltos cuánticos en vuestro ser, activando vuestro ADN para finalidades divinas en vuestro proceso.
Todo lo vivido así consta en la Gran Voluntad Divina.
No hay un solo ser que se aleje del Hogar y no retorne. Nosotros os esperamos y os alentamos desde vuestro corazón a seguir el camino hacia el Amor y la Luz.
 
Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros.
-        El Hogar   -
     


domingo, 24 de febrero de 2013

Interpretación del Enigma de Luz


El Enigma decía:

-        Última ficha de acción”
-        “Al contado”

La ficha es la decisión que tomamos a cada instante.
La última oportunidad (ficha) que tenemos para entrar en “acción” en nuestra vida es “AHORA”.
¿Cuando tomamos la última decisión para dar un paso? En el “AHORA”, en el momento de “AHORA”.
La “última ficha de acción” es el momento actual, que es cuando tenemos el poder de decidir y dar nuevos pasos en nuestra vida; por lo tanto, el enigma nos dice que solo existe un momento en nuestra vida, y que éste es el Presente, el “AHORA”. Es en este instante que tenemos el poder de ser nosotros. Cada momento es el único momento de poder que tenemos donde podemos decidir y crear nuestra vida.
Cuando se nos dice “al contado”, quiere decir que cuando hacemos algo “al contado”, lo damos todo sin quedar nada pendiente; por lo tanto, “al contado” quiere decir dar un paso, tomar una decisión sin “nada pendiente de nuestro pasado”, siendo nosotros mismos. Si así lo hacemos, no dejamos que el pasado nos influencie y predomine en el “AHORA”.
 
Pagar sin deber nada ni quedar nada pendiente, es ser nosotros en cada instante. Entonces estamos en paz (con nosotros mismos).
 

Conclusión:
Solo hay un momento de poder en nuestra vida, y ese es el presente, el Ahora actual. Si decidimos según sentimos, escuchando a nuestro corazón, haremos aquello según nosotros somos, no según nuestro pasado.
Cuando hacemos lo que sentimos en nuestro interior, según nuestro corazón, no dejamos que la mente intervenga, asociada a nuestro pasado.
Sé tú en todo momento, y este es tu AHORA actual. Será así cuando mostrarás tu poder.
Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros.
 

miércoles, 20 de febrero de 2013

La Fuerza de lo innato



Las propuestas de nuestro alrededor, a menudo nos deslumbran. Quedamos boquiabiertos por todos los ofrecimientos que podemos llegar a ver a medida que vamos avanzando por nuestro camino.
Atendemos a uno, después a otro, hasta llegar a un punto donde nuestro actuar queda ligado a lo que podamos encontrar en nuestro entorno. Uno tras otro, los acontecimientos y situaciones creadas por terceros se nos presentan ante nosotros, con la intencionalidad de captar adeptos a sus proyectos. ¡Estamos tan deslumbrados por la cantidad de direcciones que vemos a nuestro alrededor que, con el tiempo, nuestro ser se convierte en alguien pendiente de una nueva oferta! Perdemos la capacidad de sentir nuestro interior y saber qué nos está diciendo. Todo es muy rápido.
Imaginaos a un niño de unos 7 u 8 años en una habitación donde encuentra un baúl. Se dirige a él, antes que nada, y una vez delante de su presencia, mira cómo abrirlo para satisfacer su curiosidad y poder llenar su tiempo con algo que le satisfaga. Abre la tapa. Por momentos se queda quieto por la cantidad de objetos, cosas y vestimentas que encuentra allí. De repente se inclina ante él y empieza a remover todo su interior. Hay prendas que las esparce fuera del contenido que se hallaban. Después de un buen rato y no encontrar nada que le sea útil en aquellos momentos, se levanta, y como pensando qué hacer ahora, mira en su bolsillo y encuentra una canica de colores. Sonríe y empieza a jugar con ella. Así pasa su momento más preciado en el presente.
De alguna manera, si alguien se encontrase en una situación como la descrita o similar, vendría a ser una señal para que el ser despierte y sepa qué hacer en aquellos momentos en su vida.
Así el ser humano busca donde no encontrar, aunque la variedad inicial que le rodea sea una especie de tentación. Al final, se dará cuenta que lo que realmente está buscando, él ya lo tiene y siempre lo ha tenido.
Nuestro presente tiene que ver con lo que nosotros ya somos, con el contenido de nuestra existencia y lo que se encuentra en nuestro interior. Si miras bien, verás que en tu bolsillo interior contendrá justo lo que necesitas en aquellos momentos para gozar de la vida y sentir la ilusión de lo aparentemente nuevo. Todo es muy sencillo: no necesitamos grandes baúles para descubrir nuevos tesoros, porque en la sencillez se encuentra la capacidad de los grandes logros, y éstos, se encuentran en ti. Cuando pongas tu mano en el bolsillo adecuado de tu presencia, te darás cuenta que aquello que buscas ya lo tienes.
Tú, amado ser humano, que apartas la niebla de tu camino con tu voluntad y predisposición, a ti te digo que no por más buscar más allá de tu piel, vas a encontrar. La llave que buscas para tu vida ya se te fue dada. Aunque no la hayas encontrado todavía, no te preocupes, busca en tus bolsillos interiores y, al final, vas a encontrarte con ella. No desfallezcas. Continua, porque lo que es valioso e importante en tu vida se encuentra en ti.
Es tentador lo que se nos ofrece, pero la mayoría de propuestas son parciales que harán que necesites cada vez más para completar tu curiosidad e interés hacia quien eres.
¿Sabes?, en tu interior vas a encontrar la esencia absoluta para ser tú mismo. Es cierto que hay quien puede mostrarte el camino hacia ti, pero solo lo vas a encontrar si escuchas tu corazón, teniendo presente que la mayoría de las ofertas son parciales, o complementos de lo esencial. ¿Seguro que quieres seguir este camino de la no satisfacción plena?
He llegado a conocer almas que han hecho todo tipo de cursos, y algunos de ellos parecían ser la panacea del ser. Actualmente continúan buscando y hurgando en el baúl de su entorno. ¿Cuándo vais a ir, sin miedos y abiertos de corazón, a mirar en la dirección adecuada?
Aparentemente lo anunciado con letras de neón parece ser el camino a seguir. Puede ser un inicio del despertar de muchos, todo y así, cuando finalizamos la actividad elegida, vemos que todavía nos falta algo, al cabo de unos días.
Nacemos con un gran potencial integrado en nuestro ADN. Activarlo es parte de nuestro proceso. La dependencia lo bloquea todavía más, mientras que el descubrimiento de uno mismo lo activa.
Nacemos con unas herramientas ya adquiridas por el solo hecho de dar el consentimiento de volver a nuestra encarnación. Descubrirlas es el mayor tesoro que podremos llegar a descubrir. Llegar a él, nos permitirá abrir las puertas del verdadero ser que somos y elevar nuestra alma hasta peldaños inimaginables.
Nuestro entorno nos pueda ayudar, pero tened presente que en nosotros se encuentra lo que necesitamos, buscamos y deseamos. Cuando conectamos con el verdadero ser que somos, entonces nos damos cuenta que las puertas se abren y perdemos toda motivación para buscar fuera de nosotros, y en cambio, nos motiva el ir adentrándonos en este mundo interior de nuestro centro, donde iremos encontrando por el camino, cada una de las herramientas que podamos llegar a necesitar a lo largo de nuestra existencia actual. Se nos irán abriendo unas puertas que hasta entonces nos pensábamos que estaban cerradas a nuestro ser o que no las vimos en su momento. Travesarlas nos llevará a un estado de mayor bienestar, manteniéndolo y sintiendo aquello que todos somos: AMOR.
Otras puertas están dispuestas a presentarse ante nosotros y abrirse. A través de ellas llegaremos a quienes nos rodean desde el mundo sutil de la Luz y el Amor. Podremos llegar al Hogar del cual todos procedemos.
Poner la mano en nuestro bolsillo y encontrar la canica, nos puede llevar al umbral de nuestra divinidad. Así de sencillo.
Abrid vuestro corazón. Escuchad lo que os susurra y haced lo posible para realizar su guía.
La vida es sencilla cuando la vivimos desde el corazón. La grandeza del ser humano se encuentra en el grado de humildad y sencillez de su presencia.
¡Es tanto lo que hay en nosotros! Lo que podáis llegar a sentir es imaginable en estos momentos para la mayoría de los que leéis estas palabras. Lo que está por venir, desde vuestro interior, en nada se parece a lo ya vivido. El universo espera que os predispongáis al camino de vuestro interior. Seréis guiados, protegidos, y sobre todo, amados como nunca hasta ahora lo habéis estado.
El camino está en vosotros, no en las proposiciones de vuestro entorno.
Haz silencio. Escúchalo y pregúntate hacia dónde debes dirigirte. Aquello que puedas llegar a sentir, puede ser el camino a indicado.
Aquello que buscas, ya lo tienes. Aquello que anhelas, siempre lo has tenido.
No hay mayor satisfacción que sentir la esencia de uno mismo con todo el potencial que os abraza.
La fuerza de tu vida se encuentra en ti.
Tú eres Amor, y es este Amor que te abrirá las puertas de tu realización.
 
Deseo, sinceramente, que el discernimiento, el Amor y la Paz sean en ti.

domingo, 17 de febrero de 2013

Enigma de Luz



Hoy quiero compartir con todos vosotros algo que en su momento viví justo momentos antes de levantarme una mañana.
En este estado oí que se me decía:
La última ficha de acción”- como si se me preguntase.
Sabía que se trataba de un mensaje de mis acompañantes del Hogar.  A veces juegan conmigo con mensajes que tengo que interpretar. A veces son directos y claros, pero saben que me gusta interpretar lo recibido, así que una buena mañana, justo cuando te encuentras en este estado de semiinconsciencia profunda, oí este mensaje:
La última ficha de acción”.
Ahora quiero compartirlo con todos vosotros, teniendo presente que la respuesta la daré el próximo lunes 25.
Quiero haceros partícipes de esta parte del encuentro con mis hermanos de la Luz, como si fuera un misterio a resolver dentro del Gran Despertar que nos encontramos los que compartimos nuestra esencia con una biología.
Por cierto, la comunicación no acabó aquí. Sabedor del por qué de estas palabras, quise saber su interpretación. Por momentos me encontré diciéndoles:
¿Qué me queréis decir con esto? ¿Qué significa?
A continuación me dijeron, como respuesta a mi petición:
Al contado”.  
Esta era la respuesta a las primeras palabras.
Llegué a interpretar lo que se me dijo, y ahora os dejo a vosotros para que lo reflexionéis. ¿Qué pensáis que significan estas palabras procedentes de la Luz?
Como ya he dicho antes, la respuesta la daré el lunes que viene. De momento os dejo con el enigma procedente del Hogar, lleno de sabiduría y amor.

-“La última ficha de acción
R.: “Al contado”.

Hasta entonces, que vuestro corazón os guíe para llegar a la Verdad y que el Amor y la Paz sean en todos vosotros. 

miércoles, 13 de febrero de 2013

Conversación ante el espejo



-        ¿Cómo te sientes? – pregunta quien se encuentra ante mí.
-        Como si me vaciaran para dejar lugar a la nueva decoración – respondo.
-       
-        Es como si hubieran apartado las cortinas y ahora entrase la luz iluminando toda la casa como no había sido hasta ahora, sintiendo la calidez del sol en mí. Hay una luz que no había hasta hace poco.
-        ¿Y tu mundo interior? – me pregunta quien se encuentra ante mí.
-        Hay una expansión tal que mis ojos no pueden divisar el infinito de mi visión. Siento una fuerza y serenidad a la vez que permite la Maestría emerger de su aprendizaje. El que fue discípulo, va manifestando la Maestría que hay en él. Hay una predisposición de todo mi ser para dar paso a uno de nuevo según los peldaños dados.
-        ¿Qué sientes realmente? – continua preguntándome.
-        Un abrazo divino en mí, teniendo la certeza que solo es el principio de una divinidad mostrándose, en la discreción, con paso firme. Mi ser parece encontrarse a gran distancia de lo que fue. Siento la fuerza de la nueva energía en mí y cómo el flujo del universo atrae hacia mi alma todo lo que necesito, teniendo presente mi voluntad. Siento como las grandes puertas del apocalipsis existencial van abriéndose de par en par para mostrar la esencia de mi existencia, conforme fue pactado antes de mi nueva venida a este nuevo aprendizaje terrenal.
-        ¡Mírame y dime qué ves! – me dice quien se encuentra al otro lado del espejo.
-        Paz, serenidad, convencimiento de mi realización y mucho amor. Me siento un afortunado, pero no por haber llegado donde he llegado, sino por haber podido despertar y alejar los miedos de mi ser. Esto es lo que me ha permitido llegar hasta aquí, ante ti – respondo. A continuación prosigo: Percibo la expresión de tu imagen como la alegría de vivir y sentir la esencia que te creó en ti. Veo tu Luz y el Amor que derramas en tu mirada y tu expresión. (Pausa). Te veo – continuo diciendo – sabiendo que tu imagen solo es un reflejo de tu interior. Sigues estando en tierra agnóstica, y por este motivo, pronto finalizará tu presencia dónde estás.
-        Sé paciente – me responde - y deja que lo que sientes te lleve allí donde debas ir. Tu preparación está siendo acelerada. Déjate llevar por cada instante de tu abandono a las manos de quien te creó. La alegría es grande aquí donde estamos. Me ves, pero solo soy un reflejo de tu condición humana. Tú sabes qué representamos cada uno de nosotros. Yo aquí, y tú donde te encuentras. Estamos unidos y sin mí, no podrías llevar a término lo acordado.
-       
-        Aquello que ves no es, y lo que sientes pertenece a tu verdadero Hogar. Sabes de nuestro papel, del rol que cada uno debe de representar. Aquellos que te observen desde el corazón sabrán de ti. Los que nos miren con sus ojos físicos, dejarán de perder la oportunidad de poder estar a consciencia con la presencia del Hogar cerca de ellos. (Pausa). Pronto nos iremos, y cuando así sea, tu ser podrá manifestar lo que sientes en estos momentos.
-        ¿Por qué tanta diferencia entre tu biología y quién soy? – pregunto.
-        Así debe de ser. La Verdad se encuentra en lo oculto de la densidad. Barriendo nuestro día a día, veremos el resplandor del bienestar de nuestro hogar interior. El camino para llegar a él es la llave para recordar y reconocernos quienes somos en verdad. Apartaste el peso de lo superfluo y llegaste al corazón de tu esencia. Una vez allí, todo cambia.
-       
-        Tú cambiaste y resucitaste. Recordaste y abriste la puerta de la Familia. El Hogar te recibió con los brazos abiertos, y es menester de cada uno dirigirse hacia su corazón. Allí encontrará la llave de su vida, como tú la has obtenido. (Pausa). Acéptame, porque juntos llevaremos a término aquello que tu ser ha venido a hacer y poder elevar y liberar tu alma a las manos de tu divinidad. Ella nos dirigirá y nos conducirá a nuestro Plan Divino. Quien Yo Soy – continua hablando quien se encuentra al otro lado del espejo – es el vehículo de tu alma y quien atrae aquello que tu Voluntad manifiesta. Juntos empezaremos una nueva vida más en acorde a nuestra vibración actual. Lo que ahora hacemos solo es el preludio de lo que será. Tu fuerza y poder harán que juntos manifestemos a la divinidad que hay en nosotros. Tú eres divinidad; yo el canal por el cual te manifestarás. Me has cuidado y alimentado adecuadamente. Mi pureza facilitará aquello que pactamos.
-        Humildad. Esto es lo que quiero. Humildad, fortaleza y sencillez – digo.
-        Bueno, ¿y a qué esperamos? Aquí estoy para llevarte allí donde necesites ir – me responde quien está ante mí.
-        Calma, amigo mío – respondo. ¡Calma! Lo que ha de ser, será en su momento adecuado. El camino prosigue y juntos avanzamos acompañados por el Hogar.
-        Nada nos detendrá porque la Voluntad prevalecerá en nosotros – me responde.
-        Te amo y te agradezco tu salud y tu vitalidad – le digo.  
-        Así tú lo que has querido.

Nos miramos a los ojos. Sonreímos y sabemos que pronto tendremos buenas nuevas en relación a nuestro camino a seguir. 

domingo, 10 de febrero de 2013

La Luz de las Palabras (68)



"En el silencio hay una sabiduría innata: el Recordar."


Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros. 

miércoles, 6 de febrero de 2013

Los Tesoros ignorados



Hoy quiero hablaros de los pilares de nuestra divinidad. A menudo nos lamentamos de poder hacer o saber algo que por naturaleza ya nos es innato pero nuestra condición humana no siempre colabora con nuestra voluntad para poder darnos cuenta del verdadero potencial existente en cada alma encarnada.
¿Alguna vez os habéis preguntado por qué los niños son como son y muestran la actitud que manifiestan ante todo lo que les rodea?
¿Alguna vez os habéis planteado por qué este período denominado infancia acaba siendo limitado?
Hoy quiero regalaros una puerta abierta para que veáis a aquellos que conviven con nosotros de cierta estatura no superior a la nuestra, y podáis daros cuenta de lo que representan para cada uno de nosotros, como espejos de nuestra esencia. Desde mi corazón, para todos vosotros.
¡Hay tanta ignorancia en relación a lo que representan y son en verdad estos seres de pocos años en esta encarnación! Es un desprecio para nosotros mismos y el ser humano en general. No ser conscientes de un hecho, que todos hemos sido parte de él en algún momento de nuestra vida. Imaginaos que pedís a Dios que os dé el alimento que necesitáis, y habiéndooslo dado y mostrado ante vosotros, no lo reconocierais como tal y continuarais insistiendo  en querer comida. De alguna manera así sucede con nuestras necesidades para nuestro camino, diferente para cada uno.
El niño es la respuesta a nuestras necesidades. El niño es el camino hacia el alimento de nuestra alma, las herramientas para llegar al tesoro mayor encontrado por nadie: encontrar, conocer y saber utilizar los pilares de nuestra divinidad. Los niños son los alimentos del ser manifestados según la intencionalidad divina, este alimento que nos permitirá llegar a conectar con el verdadero ser que somos y poder manifestar nuestro pleno potencial espiritual que nos empoderará como seres divinos que cada uno es.
Pedimos y pedimos sin darnos cuenta que lo que ansiamos ya se nos ha dado.
¿Realmente alguna vez os habéis planteado por qué los niños actúan como actúan en su día a día? Observarlos y os veréis reflejados en sus actos. Ellos son los verdaderos maestros para nuestros tiempos. Ellos son la guía, las instrucciones para los nuevos tiempos que nos encontramos inmersos.
¿Y ahora qué?, os podéis preguntar. La respuesta es bien sencilla, clara y contundente: observa a los niños y sabrás de tu camino.
Necesitamos pureza y un espejo que no esté contaminado por las creencias de nuestra cultura e historia. ¿Qué mejores maestros que un niño para seguir sus pasos en nuestra madurez? ¿Realmente hay madurez en nosotros, o solo es el hecho de haber estado más tiempo en esta encarnación que otros? No es el tiempo que estamos aquí, sino el aprendizaje obtenido de lo vivido.
La inocencia y la pureza de estos seres nos iluminan el camino a seguir. En su silencio, cada vez menos, se acercan a nosotros y nos dicen:” ¡ven, acércate y sígueme!”.
¿Cuántos de vosotros así lo habéis hecho? Ellos se sienten solos ante nosotros, porque ven que no les hacemos caso y los consideramos inferiores. Saben, por eso, que algún día despertaremos y los observaremos. Veremos lo que hacen, cómo actúan, qué dicen y cuándo lo dicen. Algún día nos acercaremos a ellos y les hablaremos de tú a tú, consultándoles y haciéndoles partícipes de las decisiones familiares y de su camino. Llegará el día que nos sentiremos iluminados por sus resplandores, pudiendo ver la dirección a seguir para nuestra alma. Ellos se darán cuenta y entonces, podrán llegar a ser ellos sin preocuparse de nosotros e insistir en mostrarnos el camino. Verán que nos habremos dado cuenta de sus presencias y se sentirán Uno con nosotros.
Parecen ser diferentes a nosotros, pero en fondo, son parte de nosotros. Nos muestran aquella parte que hemos olvidado y que necesitamos recordar y recuperar cuanto antes. Por eso ahora, lo que conocemos como niños, son así, decidles índigos, cristales,….. Es la hora de recuperar el tesoro perdido por la mayoría de los adultos que habitan este planeta, por eso, desde las estrellas, nos han enviado unos seres diferentes a cómo éramos bastantes años atrás. Son seres fuertes, insistentes, alegres y amorosos a la vez. Sus presencias nos recuerdan constantemente nuestra pureza inicial e innata. Todavía la tenemos, solo que ahora hemos de ir, nuevamente a ella.
No hemos perdido nada de lo que trajimos al encarnar. Sólo lo hemos olvidado y por eso las divinidades niños están con nosotros.
Ellos contienen la esencia y todas las herramientas para aposentar los pilares con los cuales fuimos creados.
En las sociedades que vivimos parece ser que necesitan asociar cada período de nuestro crecimiento con alguna característica. Así, el planteamiento social impuesto parece tener controlado cada paso del individuo. Necesita etiquetar cada momento de nuestro proceso, dentro de una ignorancia absoluta de lo que representa cada manifestación en cada etapa del ser. No hay una característica para cada período. Todas están incluidas en todo nuestro proceso, dispuestas a hacerse servir cuando así lo creamos necesario, no unas para unos años, y las otras para otros años. No funciona así en un proceso espiritual que es el que nos encontramos, pero racionalizar permite dar una falsa seguridad a quien etiqueta y asocia una capacidad o don a una época en concreto. ¡Ingenuos humanos!
Como un arqueólogo que se adentra en las profundidades y excava y excava una y otra vez hasta encontrar, así aquello que buscamos para nuestra plena felicidad y realización se encuentra en nosotros. Buscar fuera es como si un arqueólogo buscara en el balancín más elevado de una noria de un parque de atracciones.
¿Os habéis preguntado también alguna vez porque se asocia a los niños unas capacidades y características concretas, y a cierta edad se les deja de asociar? Imaginación, curiosidad, disfrutar de todo lo que hacen, reír, no tener miedo, admiran todo lo nuevo, y cada día es algo nuevo en relación al ayer,….¡hay tantas cosas que nos muestran su pureza, inocencia, amor, ternura, gozo con lo que hacen, vivir el presente,……..y así una infinidad de aspectos relacionados con una actitud ante la vida!
¿Hay alguien que les suene todo esto? ¡¡Claro que sí!!! ¡¡Estos son vuestros pilares olvidados!!! ESTE ES EL TESORO QUE DEBÉIS DE RECUPERAR para vuestro ser y plenitud.
La imaginación y fantasía no solo son para quedar olvidadas en el pasado, son herramientas fundamentales para vuestro camino.
La alegría y despreocupación no es porque son irresponsables, sino porque saben que todo lo que necesiten lo obtendrán. ¡Por qué no sentís igual en vuestro interior, porque así, será desde los Cielos hacia vosotros!!
El reír y el vivir el presente intensamente son aspectos cruciales para vuestro sendero en esta dimensión. ¿Cuánto hace que no reís de corazón, que no lloráis de tanto reír, y veis como el tiempo os pasa haciendo aquello que os gusta? ¿Dónde está el hacer aquello que sentís que debéis de hacer y no hacer porque toca hacer, sin más? ¿Qué no os dais cuenta que las luces en forma de niños nos están transmitiendo y enseñando como vivir constantemente y pocos son aún los que se dan cuenta del sentido de sus presencias en nosotros?
¿Cuándo llegará el día que abriremos los ojos de nuestro corazón y veremos a Dios manifestado ante nosotros sonriéndonos e indicándonos el camino a seguir y nosotros adentrarnos en él sin más palabras que la sensación de gratitud de su presencia en unos cuerpos más jóvenes que el nuestro?
¡Despertad amadas almas y reconoced a quien se nos envió para nuestro recordar y poder conectar nuevamente con el verdadero potencial que hay en nosotros! Los niños son el despertador que nos avisan de los tiempos de ser nosotros y recordar nuestra divinidad. Ellos, al igual que nosotros, pertenecemos a una esencia superior a la materia. Los niños nos recuerdan quiénes somos y son nuestro espejo.
Cuando más nos parezcamos a ellos, mayor será la obertura de nuestro corazón y la alegría y felicidad en nuestras vidas.
Ellos nos muestran una dirección sin etiquetas, resentimientos, desamor y desconfianza. Nada de esto pertenece a quienes somos realmente. Observar a los niños, aceptadlos y abrid vuestro corazón para ser uno con ellos.
La visualización, la imaginación no es cosa de niños, de tonterías.
El reír y el buen humor nada tiene que ver con el desinterés e irresponsabilidad ante la vida.
La alegría y el disfrute con lo que hacemos no quiere decir que no seamos personas responsables y no sepamos estar en nuestro lugar.
Cada una de las características de los niños también las poseemos nosotros y son las herramientas para construir nuestra vida. Ellas perduran hasta nuestro final. No pertenecen a una etapa y ya está. ¡No! Son parte de nuestro potencial, y como tal, debemos de potenciarlas para aprender a hacerlas servir y así, poder crear nuestra vida según nuestra voluntad y lo que hemos venido a hacer cada uno.
Nuestros pilares se encuentran en el niño, y en el fondo, todos tenemos aún, este niño en nuestro interior esperando que le hagamos caso de una vez para sanar y gozar de la vida. Ser felices pertenece al niño/a interior, no al adulto actual.
Si de pequeños potenciáramos estas capacidades, con el tiempo aprenderíamos a hacer servir la mente, el pensamiento positivo, la imaginación, la palabra, la actitud, el sentimiento y la observación, entre otras, para construir la vida por la cual nacimos.
En las sociedades que vivimos, nos toleran soñar, inventar, disfrutar al máximo de nuestra existencia, pero al llegar a cierta edad nos truncan todo deseo, alegría e ilusión, porque nos insisten con sus palabras diciéndonos que hasta ahora todo ha sido una quimera, pero en verdad la vida depende del dinero y nos empujan hacia la valoración de hacer aquello que nos aporte más posesiones basadas en el miedo por un futuro incierto. Poco a poco nos van alejando de todo aquello que en el fondo somos para hacernos creer que aquello que sentíamos y pensábamos no es real, y que la realidad es la limitación del ser humano, las preocupaciones, el desencanto y la anulación, muchas veces, del individuo que somos.
Por eso están los niños, de la manera que son, con nosotros, recordándonos el camino a seguir, y que no debemos de negar quiénes somos y el potencial que cada uno de nosotros tiene.
Las capacidades innatas del niño perduran hasta que trascendemos esta vida. No son caducas. Siempre están con nosotros. Solo se necesita que recordemos quiénes somos y que aquí están, para ser utilizadas cuando volvamos a recordar.
Todo lo que necesitamos, ya lo traemos y lo manifestamos cuando somos niños. En este período practicamos con ellas para aprender a hacerlas servir, pero cuando queremos ir más allá para ser nosotros, nos cierran el camino. Algunos lo han llegado a superar y continuar con las herramientas divinas, aposentando sólidos y robustos pilares para sostener la Luz de nuestro amado planeta y ayudar a la humanidad a dar nuevos pasos hacia su evolución. La mayoría os quedasteis en la infancia, aunque algunos/as conseguisteis manifestar alguna que otra capacidad de antaño, haciendo que vuestra vida actual sea más placentera y amorosa.
Con el tiempo, y ahora es este tiempo, empezaréis a recordar cada vez más vuestra verdadera naturaleza y os empezaréis a acercar más a los niños. Ellos son vuestra naturaleza divina manifestada con la intencionalidad de ser un espejo para vosotros y podáis llegar a decir, una vez os miréis en él: ¡Sí, yo quiero ser lo que veo!
Muchos necesitáis ver para saber hacia dónde dirigiros. Bueno, fuisteis escuchados y ahora se os da: los nuevos niños. Son diferentes, es cierto, pero así ha de ser para romper todas las estructuras rígidas y limitadas que impedían que el ser humano pudiera evolucionar. Estos niños os están advirtiendo que es posible un cambio y que sus presencias quieren ser honradas y respetadas por vosotros. Cuanto más ellos vean que los seguís y obráis como ellos creen que ha de ser, es decir, desde el corazón, más engrandeceréis vuestras vidas e iluminaréis el universo que vivís. Cuanto más así sea, más permitiréis que el Cielo sea en la Tierra, y los niños son las bendiciones que recibimos por la pureza, sabiduría, inocencia y amor derramado por quien nos creó a través de unos seres llenos de Luz, Bondad y un Amor puro e incondicional procedente del Hogar del cual todos procedemos.  
¡Honrad, bendecid y sentid al niño que hay en vuestro interior!
Los tiempos que vivimos son los de apertura interior, de abrir el corazón y recuperar los orígenes de nuestro ser.
Todas las características que asociáis a un niño, es el potencial divino que estáis esperando. ¡Recuperadlo! ¡Todavía lo tenéis! ¡No caduca!
Sed Uno con todos los niños del mundo y oiréis los cánticos celestiales del gran cambio anunciado en nuestros tiempos.
El Amor abre los caminos interrumpidos por nuestros miedos. Solo el Amor te va llevar a ti, por eso los bebés y los niños son ellos mismos, tal cual.

Las palabras de hoy son de vital importancia para la nueva etapa que nos estamos adentrando. No hay que buscar a fuera lo que ya hay en nuestro interior, y si lo que nos rodea nos permite llegar más a nuestra verdadera naturaleza, ¡adelante! ¡Seguid la Luz porqué hay niños manifestados en un cuerpo de adulto! Por suerte, hay quien, con su fortaleza interior, superó la línea de la infancia con la pre adolescencia y juventud, manifestando la divinidad, el niño que habita en su interior.
En su momento, Jesús dijo: “Dejad que los niños se acerquen a mí”.
¿Entendéis ahora el por qué?

Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros. 

domingo, 3 de febrero de 2013

Congreso sobre Presencia Extraterrestre



¡Hola a todos!

Os comunico que el próximo fin de semana 6/7 de abril se realizará en Barcelona el Congreso sobre Presencias Extraterrestres, para mostrar la Luz de lo que vivimos en los tiempos actuales a través de las experiencias personales de todos los que expondremos en dicho acontecimiento. (Ver documentos adjuntos y links del final).
Allí me encontraréis haciendo la ponencia: MI VIDA CON LOS HERMANOS DE LA LUZ: SUS PRESENCIAS Y MENSAJES.
No será un evento desde el esoterismo, sino desde la vivencia diaria de aquellos que, día a día, viven sabiendo, sintiendo y comunicándose con el mundo sutil que nos rodea.
Todos podemos deleitarnos y sentir la plena presencia amorosa de quienes nos rodean en cada momento. Nunca hemos estado solos ni lo estaremos.
Tú también puedes abrir las puertas de nuestros hermanos de la Luz y de todos aquellos seres que nos rodean, que aunque no los puedas ver, no quiere decir que no existan.
En este congreso podrás oír experiencias y sentir, en alguna que otra meditación o ejercicio guiado, más allá de tu terrenalidad.
La Luz y el Amor están en nosotros. El Hogar quiere abrirte las puertas para ser Uno con ellos.


Un abrazo