jueves, 31 de diciembre de 2015

Alzheimer



Los diagnósticos físicos son consecuencia del tratamiento superficial de los síntomas aparecidos en un ser humano. Cualquier deducción basada en la materia nos hace quedar a las puertas del verdadero sentido y causa de lo vivido.
Más allá de la forma y sus consecuencias, éstas están fundamentadas por unos principios emocionales que nos llevan a un bloqueo y unas consecuencias no queridas por parte de quien las padece.
Deducir que el alzheimer, entre otros aspectos, es fruto de un desgaste y pérdida de la memoria, de los recuerdos de la vida de uno, o como mínimo, de ciertos recuerdos, es banalizar la situación, digamos, de quien lo vive.
Teniendo presente que toda manifestación física es el resultado de una manera de ser y de sentir en relación a ciertos, o todos los aspectos de la vida, nos lleva a valorar la importancia de los sentimientos y sensaciones que habitan el interior de un ser humano. La comprensión de este interior nos llevará a una visión mucha más amplia de los síntomas etiquetados como alzheimer.

Hay unos puntos en común, unas semblanzas entre todos los que padecen esta sintomatología: parte de su pasado.
Cuando alguien llega a un punto donde el declive racional empieza a ser muy notable y acelerado, no es porque sí, teniendo presente que no todos los pacientes siguen el mismo ritmo ni el mismo proceso, manifestando los mismos síntomas, aunque muchos sí que coinciden. Cada uno es diferente, según su pasado. La aceleración de vivir en un mundo irreal no es la misma para todos. Su entorno es importante, según reaccione a tales manifestaciones.

Volviendo a las causas comunes entre todos los que manifiestan estas limitaciones mentales, entre otras, se encuentra su pasado.
Teniendo presente otros ejemplos y comparándolos entre sí, vemos que hay unos puntos en común que podríamos concentrarlos en tres, teniendo presente que cada uno de ellos contiene matices para entender mejor el diagnóstico médico. Estos puntos son:
1.       Padre dominante, teniendo presente, el paciente,  la figura masculina de su entorno como algo dominante, severo y rígido. Esto conlleva, muchas veces a tener una pareja que sigue este rol.
2.      El sentirse “poca cosa”, inferior a los demás, callando y obedeciendo por miedo a las reprimendas o equivocarse, debido que uno piensa que no lo hará bien y se equivocará y todos se darán cuenta, según él, de su poca valua o capacidad. Es el sentido de infravaloración.
3.      Anulación del propio ser. Ausencia de autoestima y pensar más en los demás que en uno mismo.

Estos son los aspectos más notables de una base para que en el día de mañana uno pueda empezar a manifestar los síntomas que se conocen como alzheimer.
Ante estas circunstancias, albergadas en su interior, el ser actúa siempre para agradar y sentirse valorado como tal. Cuanto más nos esforzamos en este sentido, más nos anulamos y tomamos el exterior como referencia de nuestra vida, alejándonos de nuestra esencia y nuestro ser, perdiendo todo el poder que podemos llegar a tener. Debido a esto, el proceso en la vida de uno no es agradable, almacenando resentimiento, sentido de culpabilidad, nula autoestima e impotencia por no llegar a ser nosotros mismos, debido que los demás pueden con nosotros. Hay un sentido de víctima albergado en el proceso.
Ante esta situación, se llega a veces, a no querer saber, inconscientemente, nada de nuestro pasado por el dolor emocional sufrido. Es este dolor emocional el que produce los bloqueos en nuestro cuerpo y la reacción de las partes físicas de nuestra biología.
Entonces, se llega al punto de “querer olvidar”. Uno se encierra en su mundo y deja de recordar. Al dejar de recordar, el pasado empieza a disiparse y a desaparecer de nuestra vida, pero sus raíces, sus reminiscencias emocionales se encuentran impregnadas en nuestro ADN, haciendo que reaccionemos según lo vivido pero sin saberlo. Actuamos por actuar, llegando a vivir exclusivamente el presente, sin más. El tiempo ya no existe. Pasado y futuro dejan de tener sentido y espacio en nuestra vida. Solo existe el presente viviendo con el pasado que dirige nuestras vidas. Actúas y no sabes el por qué los demás reaccionan hacia ti de la manera que lo hacen. No entiendes, la mayoría de las veces sus reacciones porque no tienes recuerdos, solo las creencias de un pasado limitado como víctima te hacen reaccionar así pensando que es lo adecuado a hacer.
Cuando solo existe el presente dando de la mano al pasado, la vida deja de entenderse y solo puedes llegar a sentir si estás bien o no, si tu pasado se remueve en ti o no; es decir, la aparición de los enfados, los momentos como de histeria debido a la impotencia acumulada en tu interior de no hacer las cosas bien para que los demás no denoten tu complejo de inferioridad y poca cosa.
Lo que se conoce como alzheimer no es contagioso, pero sí las creencias y las actitudes de nuestra familia y de cómo reaccionamos nosotros a nuestro exterior, nuestro entorno. Estas creencias no siempre sintonizan con lo que tú sientes, y en su momento, se decide hacer caso y actuar según los demás y no según sentimos nosotros. Nos vamos anulando cada vez más. Tengo que decir, que las personas más sensibles, son las que, actuando así, pueden llegar a unas manifestaciones que, con el tiempo, pueden llegar a diagnosticarse como alzheimer.

Es la ausencia de autoestima, el no ser tú desde la infancia y el no mostrarte tal como tú eres, lo que puede llevarte a este diagnóstico. Los casos que he podido llegar a conocer, proceden de una familia, un padre muy rígido, dominante, inflexible y autoritario. Cuanto más sensible sea la persona, más propensa estará a poder manifestar los primeros síntomas con los años.
Todo y así, podemos invertir esta situación si a lo largo de nuestra vida empezamos a dar pasos hacia nosotros. Si el ser no quiere y no hace nada para él mismo, puede desembocar en un estado de declive mental que le irá carcomiendo y limitándolo cada vez más hasta convertirse en un ser vegetal, donde ya nada puede llegar a controlar.
Pierde todo criterio porque siempre ha dependido de lo que los demás dicen.
Su vida es un descontrol absoluto, haciendo ver que todo lo controla, pero nada más lejos de la realidad.
Crea su propio mundo, con sus expresiones tópicas para relacionarse o dar a conocer que él o ella está en todo y todo lo sabe hacer.
Es el pasado incrustado en nuestro interior quien guía y dirige los pasos de quienes padecen esta etiqueta. No son ellos, y cada vez menos, alejándose de sus esencias para convertirse en seres que sencillamente están. Sin más. Es una manera de querer olvidar lo vivido y empezar de nuevo, dejando este mundo porque no es el que ellos sienten en su interior, pero ven que no pueden hacerlo.
Sus vidas se apagan por momentos. Sus actos ya no son coherentes y sus palabras una justificación desesperada para que los tomemos en serio. Cada vez se sienten más con ellos mismos, encerrados, dejando que su exterior, al igual que de pequeños, en su infancia y juventud, decida por ellos. Al final, es literal y así es.
Dejan su mente para centrarse en su corazón.
Dejan el raciocinio para adentrarse en lo que sienten. Sólo saben si su estado es “bien o mal”. Solo viven en el presente. No hay otro momento.
A pesar de todo esto, aunque parezca contradictorio, ellos pueden vivir más relajadamente porque ya nada les preocupa. La preocupación es tiempo, es decir, pasado y futuro, pero como se han estancado en él y viven siempre en el presente, si su entorno es el adecuado, pueden vivir más relajados y, no tan solo sonreír, sino el hecho de reír juntos más asiduamente.
En estos casos de llegar a un punto notable de decadencia mental, el apoyo y el hábitat donde viven es básico. Solo el Amor puede ver la situación desde el aprendizaje y cariño. Solo el Amor puede desdramatizar la situación y vivirla desde la naturalidad. Entender al paciente te hace ver su experiencia desde otra visión, la visión desde el corazón. Entonces, desde aquí, solo os podréis acercar y comprender lo que el otro vive, sin compasión terrenal de “¡oh, pobre!, solo desde la compasión de aceptación y respeto hacia la otra persona. No viéndola como alguien que no puede, sino apreciando su esencia divina, y sus sentimientos amorosos todavía activos. Estos se encuentran activados hasta su final, pero debido a la falta de consciencia, se aleja de su saber divino.
Por otros escritos al respecto sobre el alzheimer, mi ser vive momentos de este declive por parte de alguien amado. Siento su impotencia interior de no ser correspondido y valorado por lo que es. A lo largo de su vida le han ido cortando las alas y, ahora, en su vejez, su mente no quiere continuar teniendo presente lo que ha permitido vivir que le ha llevado a una situación de, sencillamente ser y estar.

Siento un gran respeto por este ser y me ha permitido poder tener un aprendizaje al respecto de la sintomatología manifestada. Esta alma, una gran maestra está siendo, no tan solo para mí, sino para todos aquellos que con ella conviven o se relacionan.
Ella, nada de esto sabe, porque en su presente solo aprecia si hace sol o llueve, si hace frío o calor, si alguien la ama o no.

Mi amor está contigo y deseo que tu alma, en el momento determinado se dará cuenta que el Amor lo puede todo, incluso hacia uno mismo. Cuando el Amor es desinteresado obra milagros, cuando damos o nos ofrecemos contra nuestra propia voluntad, aparentemente, nos morimos y anulamos en esta vida. Por eso, cuando llegue tu momento, amada alma, sabrás la verdad de tu situación y la de todos aquellos que te hemos rodeado a lo largo de los años parte de tu camino.

Gracias por ser y estar en mi vida en estos momentos.
Mi Amor está contigo.
No estás sola, amada alma que vive el presente guiada por tu pasado.

Que el Amor y la Paz sean en ti, pudiendo sentir el sosiego de la presencia de quienes te rodean. Ellos también están aprendiendo de ti.


Gracias. 

lunes, 28 de diciembre de 2015

Encuentros para el mes de enero de 2016

Aquí os presento los encuentros previstos para el próximo mes de enero de nuevo año.

Si queréis que estas actividades se realicen en vuestro centro o población, podéis enviar un mail a la dirección que consta en el documento adjunto.

A todos, un abrazo y ¡hasta pronto!


jueves, 24 de diciembre de 2015

A vuestro corazón

Aunque parezcas un ser humano, no lo eres. Aunque tengas la sensación que estás atrapado y limitado, no es así. Aquel quien tú eres procede de la Fuente Madre de la Creación.
Sois maestría estelar, Fuente creadora de Vida eterna.

No os identifiquéis con la materia, ésta solo es temporalidad para la evolución.

Cada vez seréis menos diferentes porque os iréis uniendo desde el corazón  y uniréis vuestras almas, vuestras esencias, creando la Fuente allí donde estéis.

El potencial de vuestro manantial interior está despertando para elevar y magnificar la Gran Voluntad Divina. Lo importante se encuentra en vuestro interior, en vuestra esencia innata prístina.
Sois la creación de un nuevo universo luminoso y amoroso.
Vosotros sois mi esencia a lo largo de los universos existentes. Sois el Amor universal encarnado para nuevas almas y la Ascensión de cada una de los miembros de la Familia esparcidos por todos los rincones de la inmensidad celestial.

Semillas brotando para instaurar el Hogar en vuestra dimensión.

Estáis dejando de ser quien fuisteis, y muchas de vosotras, amadas almas, sentís el despertar y la activación de vuestro ADN. Dejad que la liberación y la sanación sea en vosotros. Una nueva vida os está esperando. Un nuevo mundo se está creando debido a vuestra intencionalidad.
Lo que fue, ya no será,  porque una nueva energía está emergiendo de vuestros corazones para dar sentido al mayor acontecimiento que pueda haber en el proceso de todo ser: dejar la humanidad con todas sus limitaciones para dar paso a la Divinidad que hay en cada uno de vosotros.

Nosotros, vuestros Hermanos del Hogar, procedentes de diferentes rincones de vuestro universo y dimensiones, estamos y estaremos con vosotros para llevar a término la Voluntad Superior en vuestras existencias.

Habéis decidido responsabilizaros de vuestro amado planeta, de vuestro proceso. Cada vez sois más que así lo manifestáis. Desde aquí donde nos encontramos nos alegramos y todos saben de vuestra ascensión. Diferentes seres de vida sienten curiosidad por vuestro despertar y evolución.
Nosotros, vuestros Hermanos del Hogar,  estaremos siempre a vuestro lado, como lo hemos estado hasta ahora.  Cada vez nos iréis sintiendo más. Nos iréis viendo, incluso, debido que nuestra presencia cada vez es más numerosa en vuestro espacio planetario.
Ha llegado la nueva era, la nueva vida, donde el Hogar sea Uno con vosotros, colaborando dentro de esta Unicidad. Actualmente, ya hay seres que se han abierto y estamos colaborando conjuntamente en vuestro amado planeta.
 Escuchad vuestros corazones porqué ellos os llevarán a sentir vuestra esencia y el camino hacia vuestra plena realización.
Poned vuestra atención en vuestro interior y tomad la actitud de responsabilizaros de vuestro despertar para que vuestra Divinidad pueda manifestarse de una manera plena y libre.
Sois el Cielo en la Tierra.
Sois Maestría estelar.


Que el Amor y la Paz sean en cada una de vosotras, amadas almas. 

jueves, 17 de diciembre de 2015

Esperar



Cuando esperamos, nuestra vida se convierte en un constante desazón y desconcierto, debido que vemos que nuestros anhelos no dependen de nosotros.
Cuando esperamos, nosotros dejamos de ser nosotros y nos convertimos en víctimas de una espera ilusoria de la impotencia de ver que nuestro entorno no reacciona según creemos. Todo se demora, y esta espera se convierte en eterna porque solo existe dentro de nuestra mente.
Cuando esperamos que los demás hagan lo que a nosotros nos gustaría que fuese, dejamos de ser nosotros para convertirnos en seres anulados y dependientes de aquello que no es. Nosotros creamos la espera debido a una visión distorsionada de la realidad, de nuestra realidad. Entonces, es cuando nos ponemos en manos de una situación ficticia creada por nuestro pasado a través de nuestra mente.
Cuando esperamos,……somos mente. ¡Somos pasado!
Esperar que la puerta se abra y entre quienes queremos.
Esperar que aquella persona cambie y entonces todo irá bien.
Esperar poder llegar a final de mes.
Esperar que las cosas cambien para una vida mejor.
Esperar es poner tu vida en manos de tu exterior.
La espera es un intervalo entre tu anulación y el responsabilizarte de tu vida. Estos momentos para responsabilizarte de tu mismo y de tu existencia, es cuando esperas y esperas, esperando que el resultado que sueñas se materialice ante ti. Entonces todo cambiará y tú podrás ser feliz.
La felicidad no depende de una espera, sino de una responsabilización firme de tu vida y de todo lo que vives en ella. Cuando te haces cargo de todo lo que vives, entonces empiezas a dar pasos hacia tu interior, no a depender del exterior. Este solo te lleva a la desesperación y al alejamiento de tu ser, cuando la consciencia no es presente en ti. Cuando esta empieza a aparecer, entonces, te das cuenta que tu exterior también tiene que ver contigo, y que muestra, en todos momento, aquello que tú sientes y eres interiormente.
Solo es un espejo de tu presente como alma que se encuentra en un estado en concreto.
Cuando no hay consciencia, la mente predomina, haciendo que tus miedos y el dolor de tu pasado aparezca y te haga ver la vida desde una visión distorsionada, por la cuantidad de filtros que has ido poniendo desde tu infancia. El pasado puede hacerte ver monstruos donde no los hay y precipicios en una playa serena y tranquila.
Esperar de una manera constante en la vida es padecer y mostrar la víctima que hay en ti. Estás creando un papel debido a la desconexión contigo mismo. Entonces, es cuando las sombras de un pequeño ratón puede parecer un gran monstruo que te persigue viniendo de los demás. Crees que lo que vives es debido a la presencia o ausencia de los otros, ignorando que eres tú quien ha creado estos momentos al esperar y hacer que los demás te resuelvan tu vida o en momentos determinados puedan complacerte sin más.
Esperar que las cosas sean como tú quieres es marcar un camino para tu propia seguridad, debido a los miedos que tienes. Hacer que todo sea como tú quieres es imponer una manera de vivir para tenerlo todo controlado y hacer que los demás estén “a tu servicio” para cuando te sientas mal o las cosas no te vayan como tú querrías.
¡No esperéis! No queráis que quienes os rodean reaccionen u os vengan cuando vosotros queráis, porque no es así como funcionan las leyes de la vida. Precisamente, estos momentos de no recibir una respuesta según nosotros querríamos, son la bendición que el universo nos da para darnos cuenta que nosotros somos la Fuente y la Salida de nuestras situaciones, no la de los demás.
Cuando no esperamos, nos responsabilizamos nosotros mismos.
Cuando aprendemos, despertamos y aumentamos nuestra consciencia, dándonos cuenta que todo lo que vivimos es debido a momentos anteriores nuestros y que todo tiende al equilibrio. Si todo el presente es debido a momentos anteriores, según los hayamos vivido, así será nuestro presente, por lo tanto, todo lo que nosotros ahora vivimos y de la manera que lo vivimos, así serán nuestros “presentes posteriores”. Nuestra vida es como el efecto dominó: poniendo todas las fichas derechas, una detrás de otra, y con el dedo tiras la primera, todas irán cayendo hasta la última. Será el efecto dominó, es decir, según el movimiento inicial, obtendrás unos resultados que te llevarán a momentos de más felicidad, cualidad de vida o no. Cuando más sientas tu esencia, el amor en ti, más amor y armonía recibirás de tu entorno, debido que es el decorado en el cual estás viviendo estos momentos por lo que necesitas vivir en tu vida actualmente.
No hay nada porque sí. Todo tiene un sentido, y los resultados que vayas obteniendo a cada paso son frutos de un pasado tuyo, de momentos anteriores con unas creencias concretas y una actitud ante la vida más abierta y sincera o de dolor y encierro. Todo depende de ti, porque TÚ ERES EL ÚNICO RESPONSABLE DE TU VIDA.
Aquello que te hace sentir mal, no es aquel o aquella que no han actuado bien, sino tu alejamiento de aquel quien en verdad eres. Cuando más alejados estemos de nuestra alma, más dolor crearemos en nuestra vida, y más dependientes estaremos de nuestro exterior, siguiendo las pautas convencionales, culturales, morales,….hasta llegar a la bifurcación de tu sendero donde tendrás que elegir entre continuar padeciendo y cada vez más, que en esto somos unos expertos; o en cambiar y responsabilizarnos de nuestra vida, dejando que el amor sea en nosotros y dando pasos para mostrar al verdadero ser que somos, y no el que nos han hecho mostrar con nuestro consentimiento.
Esperar es parte del proceso de la mayoría del ser humano. Con la espera, y el tiempo, podemos aprender a darnos cuenta de nuestro potencial y que no es necesario esperar, porque nosotros podemos materializar en el momento, a la vez que ya no pedimos ni controlamos, sencillamente SOMOS.

Que el Amor, la Paz y el Presente sean en todos vosotros.



lunes, 14 de diciembre de 2015

Fechas para el nuevo proyecto " DE VUELTA AL HOGAR"

Como ya os comenté días atrás, a continuación me complace anunciaros las primeras fechas del nuevo proyecto "DE VUELTA AL HOGAR", previstos de cara a principios del nuevo año.

Si alguien estuviera interesado en su realización en su propio centro, espacio o población, podéis enviar un mail a la dirección que constan en los documentos adjuntos.

Deseando lo mejor para vosotros, un abrazo.

miércoles, 9 de diciembre de 2015

Sobre el Presente

Debéis de ser pacientes y aceptar vuestro presente.
Este proceso de aceptación y todo lo que habéis sentido viviendo este proceso ha sido lo que os ha llevado hasta aquí. No debéis de ir a ningún lugar, solo vivir lo que ahora vivís, conscientes y aceptando vuestro presente.
Siente y deléitate de lo que vives y sientes, porque la llave tan esperada se encuentra en estos momentos en ti. Es lo que vives, el sentido de tu vida. No es lo que harás, sino lo que ahora ya haces. Lo que sientes no es para llegar a….., sino para elevar tu alma ahora y aquí. No tiene una finalidad posterior, sino que todo tiene un sentido para el ahora. Es ahora el motivo por el cual naciste no el mañana.
Cada sentimiento, cada paso que das, es fruto de lo que has venido a hacer.
Este es el verdadero sentido de tu vida, el poder vivir el Presente Consciente, no el mañana deseado. El deseo que puede aparecer solo es fruto de la no aceptación de tu presente. No hay deseos aquí donde estamos, porque todo es presente, y en el presente no hay deseo, una cuerda procedente del futuro. Este es y será según tu ahora.
No hay nada fuera del presente. Este es el sentido de vuestra encarnación. No es para algo que deberás de hacer, sino lo que ahora haces, y este hacer os llevará a obras cada vez mayores.
La misión del campesino no es recoger los frutos, sino preparar la tierra, labrarla, abonarla, sembrar, regarla y, entonces, en su momento, debido a todo lo hecho hasta entonces, recoger los frutos obtenidos.
Lo importante del campesino no son los frutos, sino todo el trabajo que hace hasta que llegan por si solos. Estos te vienen, no los debes de ir a buscar.
Así debéis de hacer, vivid el presente y dejad que los frutos os lleguen.

Que el Amor y la Paz sean en cada uno de vosotros.












jueves, 3 de diciembre de 2015

DE VUELTA AL HOGAR

A lo largo de un tiempo hacia aquí, he ido sintiendo un empuje hacia ciertos cambios dentro de alguno de los eventos que he ido realizando hasta ahora.
Los tiempos, las energías, han ido cambiando a un nivel acelerado, y los encuentros que he ido teniendo con mis hermanos de la Luz, me han ido haciéndome ver que lo transmitido hasta ahora de la manera que se estaba haciendo, necesitaba hacerse unas “modificaciones”, unas actualizaciones según el proceso de evolución que está siguiendo el proceso de la humanidad.
En todo momento, y a lo largo de estos años, he ido transmitiendo desde la pureza y el servicio a la Voluntad Superior y el Hogar, que en todo momento ha estado a mi lado en los encuentros que he ido realizando hasta el presente.
Los encuentros con mis hermanos de la Luz, sus mensajes y comunicaciones que me han transmitido en los últimos tiempos, me hacían saber que alguna de la actividad importante que he ido realizando hasta ahora, debía de “ponerse al día”, para que la pureza y el camino de las almas encarnadas sea más específico, concreto y puedan centrarse en la esencia del sendero, y no en atenciones que ya no pertenecen a lo esencial. En todo momento así lo he ido haciendo, pero ellos me comunicaron que debíamos de dar un paso más.  
Por este motivo, quiero comunicaros que el Seminario ¡SENTIR! se ha convertido en el Seminario DE VUELTA AL HOGAR. Su contenido también ha variado, poniendo más atención a la responsabilidad individual de cada ser para llegar allí donde cada uno tenga que llegar o desee, siendo la conexión con la Divinidad de cada uno, la finalidad de este encuentro.
Por lo tanto, el nombre del Seminario que se estaba realizando hasta ahora, pasa a denominarse DE VUELTA AL HOGAR. Su contenido también se ha modificado para ir más a la esencia y no a conocimientos transmitidos o sabiduría que cada uno tiene que llegar por sí mismo. En el nuevo Seminario se dan las pautas para que así sea.
Hay también, otra novedad al respecto, y es que DE VUELTA AL HOGAR puede ser un Seminario o un taller. El Seminario tiene una duración de dos días, y el taller de un solo día completo. Su contenido también varía debido al tiempo dedicado. La base es la misma en los dos encuentros, pero en el Seminario se amplia, con unos temas relacionados con nuestra Divinidad y una mayor práctica individual y entre los asistentes al Seminario. Es obvio por el tiempo de su duración. Vuelvo a decir, que la base, el nuevo contenido se encuentra en los dos eventos, conteniendo el seminario más aspectos relacionados con nuestro potencial espiritual, con nuestra verdadera esencia para llegar a sentir el Amor y realizando unas prácticas relacionadas con la sanación del ser.
Todos aquellos que hasta el presente ya han realizado el Seminario ¡SENTIR!, la realización del taller les ayudará a ver con más claridad, a reafirmar mucho más, a confirmar y a practicar los pilares básicos para andar con firmeza hacia su realización y poder sentir con más intensidad aquel quiénes son y el Hogar en ellos, como parte del Hogar que son. Será como darles una visión más global y específica del proceso a seguir. Les podrá ayudar en sentir con más claridad su verdadera esencia.

Las energías de nuestro planeta y las consciencias están elevándose aceleradamente. Ya no hay vuelta atrás. Todo se está preparando para la nueva Tierra que ya se está forjando con nuestra predisposición y servicio a la Gran Voluntad Divina prevista para nuestro mundo y todos los seres que lo habitan.
Ya no hay vuelta atrás.
Ha llegado la hora que el Cielo sea en la Tierra.

Si alguien estuviera interesado en obtener más información o en la realización de estos encuentros en su centro o población, tanto del Seminario como del taller, podéis enviar un mail a emaeljordimm@gmail.com .


Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros.