Las Emociones

Las emociones son una representación de lo vivido anteriormente. Cada situación de vuestro pasado ha conllevado una experiencia emocional en el interior de cada uno. Estas vivencias han hecho que en el ser encarnado floreciera un sentimiento, y este sentimiento expresado ha dado fruto a una emoción.

La reacción interna que podáis llegar a tener es fruto de los acontecimientos vividos a lo largo de vuestra vida.

Cuando el alma dentro de la materia vive en su presente, siendo consciente, honesta consigo misma y desde el corazón, los sentimientos tenidos son los que denomináis “amorosos/positivos”, en el sentido que le hace sentir su verdadera naturaleza y su plena presencia en esta vida en la cual se encuentra.

Las emociones son parte de vuestro proceso, y es a través del autoconocimiento que podéis daros cuenta de lo que sentís y representan cuando éstas aparecen en vuestro camino. Según lo que sentís, os indicará según vivisteis en su momento concreto y vuestra actitud ante el hecho, persona o la situación.

No hay emociones negativas, solo sensaciones que nos dan una información para llegar a nosotros mismos. Cuando alguien solo siente malestar, rabia, ira, desconfianza, recelo, rechazo o alguna característica no querida, debería de entender la presencia de estos sentimientos para hacer las paces con él mismo. Solo son notificaciones de nuestra alma para nuestro ser conforme debemos de tener presente este aspecto (el de la emoción) para continuar con nuestro proceso evolutivo.

Cuando este tipo de emociones son las que predominan en vuestra vida, ésta requiere una revisión y una manera de vivir diferente a la que estabais viviendo hasta aquel momento. A veces está relacionado solo con un aspecto de vuestro ser, y a veces, os puede indicar sobre vuestra vida en general.

El malestar es una bendición para aquellos que lo viven. No lo queríamos para nadie, pero a veces, cuando ignoramos aspectos de nuestro camino o vida, solo la exaltación, la eclosión a través de un sentimiento expresado, la emoción, nos puede hacer reaccionar para reprender el camino hacia nosotros mismos.

No hay emociones negativas ni positivas, como ya he comentado antes, solo momentos de inestabilidad para estabilizar nuestra vida y  proseguir viviendo desde nuestra esencia, nuestro interior, y no  desde el exterior.

A lo largo de vuestras vidas, el hecho de aceptar las influencias de vuestro exterior ha creado contradicciones en vosotros, en cómo veíais la vida y en cómo os la hacían vivir. Llega un momento, que de tanto ignorar nuestro ser, nuestra alma nos da una mano y nos hace sentir. Este Sentir a través de las emociones es una cuerda que el Universo nos pone a nuestro alcance para cogernos a ella y despertar de la vida ilusoria en la que nos hayamos podido encontrar aquel momento.

No hay nada que tengáis, que sintáis, que no sea para vuestro proceso de Ascensión.

Las  emociones normalmente son debidas a una vida desde la mente, esta mente racional que nos lleva a valorar la forma y no al individuo, a su esencia, respetándolo y aceptándolo tal como es.

Cuando más distancia haya entre el interior de cada uno, entre lo que siente y lo que ve y realiza según los cánones externos, entonces, más inestabilidad habrá en el ser en proceso de evolución. Cuando consiga despertar y darse cuenta que este malestar se corresponde a algún aspecto relacionado con él, entonces, habrá llegado la hora de sanar sus emociones, sean las que sean.

Podéis sanar vuestras emociones. Podéis estabilizar lo que sentís en vuestro interior debido a sentimientos tenidos y expresados. Los sentimientos no los podéis controlar, pero sí la emoción. La aparición de los sentimientos son innatos, la expresión de las emociones, voluntaria. Cuando lo que vivís se aleja de lo que sentís según debería de ser, entonces se crea un precedente para recordaros, con el tiempo, que hay algo que “no funciona” en vosotros. Deberéis de ponerle vuestra atención y adentraros en vuestro interior para conocer lo que os estáis privando en vuestra vida para ser vosotros.

Os recuerdo que cuando no actuáis desde vuestro corazón, cuando no estáis siendo honestos con vosotros mismos, vuestra alma os lo recuerda a través de una emoción, un estado alterado que os hace sentir mal. Habrá llegado el momento, entonces, de recordar quienes sois y permitir que la honestidad con vuestra esencia y la integridad se manifiesten en vuestra vida para poder sentir la Felicidad y llegar a la Realización de lo que cada uno ha venido a hacer.

Con el Despertar de la Consciencia y el Autoconocimiento os iréis encontrando cada vez mejor, teniendo sentimientos puros relacionados con quien sois en verdad.

El posible malestar obtenido “no es culpa del otro”, sino que la responsabilidad es de uno mismo, porque es uno mismo quien se ha creado esta emoción. Cada uno es responsable de sí mismo. Todo lo que podáis llegar a sentir o vivir lo habéis atraído vosotros en vuestra vida para sanarlo y  elevar vuestro ser.

Los enfados, a menudo son impotencia por no conseguir lo que uno quiere, pero en el fondo, es una actitud de victimismo y negación de uno mismo conforme cree que no puede salirse por sí mismo.

Cuando alguien se muestra tal como es, con toda su Luz y Amor, la vida “le sonríe” y atrae todo lo que puede necesitar en su proceso. No hay culpables ni víctimas. No hay ganadores ni vencidos, así como personas beneficiadas y olvidadas “de la mano de Dios”. Nada de eso es.

La vida no es lo que parece, y todo aquello que podéis ver procedente de acciones basadas desde la mente, solo es un aviso conforme ha llegado la hora de ser vosotros mismos,……y las emociones os dan una muestra de en qué grado os encontráis en el momento que experimentáis una sensación no querida.

Podéis sanar vuestras emociones, sanando vuestro ser. Está en vuestra mano ser vosotros mismos.

Son momentos claves en el proceso de la humanidad, donde la puerta de una gran transmutación se está abriendo para definir una nueva vida en un “nuevo” planeta. Éste es el que os encontráis en estos momentos, donde lo viejo ya no tiene cabida. Estáis creando una nueva vida en él, al decidir ser vosotros mismos. Vuestras energías ayudarán a otros a dar, también, este paso de ser uno mismo.

Las emociones son indicadores de vuestro estado actual y tienen que ver en cómo estáis actuando ante vuestra vida. No las veáis como algo “malo”, no querido, porque son parte de vosotros mismos para alertaros que hay otras posibilidades de vivir y de sentir la vida a cómo lo habéis hecho hasta el presente.

Cuando se siente vuestra esencia, todo es Paz, Serenidad, Comprensión y Amor.

La vida os avisa constantemente cuando algo no está funcionando en vosotros. Si estamos abiertos y receptivos, podremos sentir la llamada de nuestra alma conforme nuestra actuación necesita un retoque para ser nosotros mismos y mostrarnos con todo nuestro resplandor.

Tú eres parte del Universo, y como Divinidad que eres, cuando así no es, llaman a tu puerta interior para que la abras y darte cuenta de lo que sucede en tu vida. Es en tu interior donde podrás encontrar el refugio y la respuesta para estabilizar tu presente y manifestarte según lo acordado en tu venida a esta vida actual.

Sois Divinidad y no estáis nunca solos.

Que el Amor y la Paz sean en todos vosotros.