jueves, 30 de junio de 2016

Sensación


Tengo una sensación como si algo importante hubiera de suceder en mi vida. Algo como esperado, anhelado y que me activa la emoción y la alegría por llegar allí. Sé que a muchos de vosotros, también tenéis esta sensación.
Me siento como “ambiguo”. Por un lado tranquilo, sintiendo la paz y el sosiego en mi interior, pero a la vez, como deseando poder encontrándome en los momentos que mi interior me muestra y me va hablando desde hace tiempo.
Sé que todavía no es el momento, pero a veces, parece que estoy más allí, con mis deseos, que viviendo mi presente, importante para dar los siguientes pasos en mi proceso. Es como una ambigüedad, pero que prevalece el estado de sosiego en mi ser. Sé apaciguar mi interior y conectar, nuevamente, con mi estado natural y sentir la unicidad con mis hermanos celestiales. 
Todo sigue. Dentro de mí es como una sensación de percibir las nuevas energías que se van creando y acercando cada vez más, en mi vida. Poder llegar a percibir lo que tu proceso te depara, siguiendo el sendero tal como está siendo, te permite ver y sentir lo que será de ti en un tiempo cercano. ¡Hay tanta ilusión en mi ser! ¡Hay tanta alegría en mi alma! Lo que siento, lo deseo con todas mis fuerzas, porque veo a mi presente, ya pasado, estando en el lugar que desde hace tiempo siento en mí y deseo con todas las fuerzas de mi corazón.
Todo va cambiando aceleradamente. El camino te lleva a parte de tus raíces ancestrales, donde había una unicidad, una sincronicidad con toda la Tierra y el Cielo. (Pausa). De momento son sueños, habiendo de vivir mi presente conscientemente y con todo mi ser. Es ahora, en mi presente actual, donde el servicio realizado está llegando a su fin, pero todavía no es el momento para alzar el vuelo esperado.
A veces, el saber puede hacer que no vivas tu presente y no estés del todo presente con todo tu potencial, en el ahora y aquí.
A veces, saber unos pasos más adelante del momento actual puede darte coraje y valentía para continuar con tu proceso.
Todo está unido, teniendo presente que cuanto más conectas con tu sabiduría, más facilidad tienes de discernir lo que debes de hacer en el ahora, y lo que deba de ser, será. Aprendes a aceptar más estos momentos, donde tu ser debe de obrar con todo su resplandor. Es ahora el momento importante para llegar “allí”. No hay allí sin ahora. No hay mañana sin el día de hoy.
Aceptar y vivir estos momentos de tu vida, te permitirán abrir la puerta de la oportunidad de otros pasos a dar. No hay avance sin tu aportación en el día de hoy. Es como si estuvieras subiendo unos peldaños en tu camino, y a cada peldaño que subes, se añade otro más alto para llegar a la cima de tu realización. Si no das el paso en el ahora, no habrá un mañana, porque cada peldaño permite que otros se añadan para que puedas llegar a ti, a tu plenitud y al sentido de tu existencia.
Siento la inmensa paz en mi interior y el sosiego y dejadez, para que aquello por lo cual he encarnado sea realizado y llevado a término con todo su resplandor. Solo dejándote ir, dejar de controlar y estructurar tu vida podrás ser guiado, velado y amado en tu camino para materializar aquello que solo tú puedes realizar de la manera que tú lo harás.
No hay dos opciones en el ahora, sólo una que te llevará a unos resultados, quizás imprevistos. Si tu decisión procede del corazón, sentirás la alegría y el amor en ti. Si procede de la mente, solo facilitará que tus intereses personales demoren el bienestar y el resultado esperado, obteniendo, no siempre, aquello tal como tú lo programaste. El agua de un río no programa, sencillamente deja que todo sea, adaptándose a la situación actual sin ningún tipo de resistencia. Así el ser humano, cuando se libera del control mental de su vida es cuando empieza a florecer la luz y la expresión de una sonrisa en su vida.
No hay necesidad de padecer y sentirse mal en lo que vivimos, porque la vida, por si misma representa felicidad, bienestar y amor. El amor te llevará a tu realización sin esfuerzo. Solo existe el amor en nuestro camino, y cuando tomamos uno no adecuado, el amor nos lleva a otro, para volver al camino principal de nuestra alma. Aceptación y aprendizaje en cada paso y decisión. Las supuestas demoras dependen de la actitud tenida por cada uno en su presente.
Más allá de nuestro ahora y aquí, no hay nada, porque eres tú con tu actitud en el ahora quien va creando y construyendo el nuevo camino hacia ti. Existe todo un potencial, pero de momento es esto, un potencial, donde las posibilidades pueden tomar forma, si vivimos y actuamos desde el corazón. Solo desde el corazón podremos llegar a sentir y expresar nuestra divinidad. Programar nos aleja. Aceptar y abrir nuestro corazón para entender nuestro presente, nos llevará al sentido superior por el cual nacimos nuevamente.
Siento el proceso en mi interior, sereno, lleno de armonía y un gran sosiego que permite a mi alma avanzar con seguridad y firmeza por estos momentos de mi vida. Todo está yendo bien. A cada uno lo adecuado, a pesar de los pesares. Adentrándonos en nuestro corazón veremos el amor de lo que vivimos y el motivo por el cual estamos viviendo estos instantes. En todo momento, el universo nos acompaña y nos da la mano para poder ascender a planos superiores y vivir la vida desde la energía de más alta vibración: el Amor.
Nuestro mundo ha recibido grandes maestros de Luz y de Amor. Ahora ha llegado el tiempo que cada uno muestre su verdadero ser, aquel quien en verdad es, y poder irradiar su Luz, como ser celestial que es, y su Amor, su esencia existencial. Ha llegado la hora de dejar de esperar que “lleguen los maestros”, porque cada uno conlleva en si la maestría universal. Ha llegado la hora de recordar y manifestarnos según cada uno es. Ahora podéis. Ahora es cada uno quien debe romper el cascarón de su encierro, de su ignorancia, y empezar a vivir la nueva vida que a todos se nos ha otorgado.
¡Ahora podemos!
A partir de ahora, ya no vendrán más maestros, sino espejos de nuestro ser, donde podremos admirarnos de la belleza y el gran ser que somos. Recibiremos ayuda de la Luz, pero no esperéis grandes maestros, como ha sido hasta hace poco. Es la hora de mostrar la maestría de nuestro interior, el Dios que cada uno es.
A la Tierra irán llegando seres angelicales para ayudarnos en nuestro proceso, y cada vez más, pero para que cada uno se responsabilice de sí mismo y se adentre a su interior para resplandecer con su expresión divina. Ayudarán a los maestros encarnados, a cada uno de vosotros.
Aquel quien esperáis, ¡sois vosotros! No miréis a vuestro entorno, a vuestro exterior, porque solo encontraréis seres como vosotros que están siguiendo su camino. Podréis encontraros con seres que sean un espejo para vosotros, porque su gran Amor hará que os responsabilicéis de vosotros mismos. Ellos os pueden dar de la mano, indicándoos la vereda a seguir, la dirección de la luz y el corazón,  pero deberéis de ser vosotros quienes os adentréis y deis el paso que os llevará a un peldaño superior y al verdadero ser que sois.

Vivimos tiempos de grandes cambios, y todos ellos, gracias a vosotros. Tenéis vuestro granito en la mano para añadir a esta gran Unicidad Universal para hacer de este mundo y el firmamento, un lugar donde solo predomine el Amor y la Armonía.
Tú eres parte de este Amor encarnado. Siéntelo y haz que llegue a los que te rodean. Eres un faro de Luz y Amor para la humanidad que te rodea.
Gracias por ser y estar amada alma.
Gracias.


Que el Amor y la Paz sean en cada uno de vosotros.