Dejar atrás es
avanzar en el camino hacia ti.
Mirar el
presente y lo que sientes en tu interior te permitirá crear la dirección a
seguir desde tu ahora.
Sentir el flujo del cambio y dejándote
balancear por él, sentirás la confortabilidad del Hogar y la sensación conforme
lo que fue, no fue según tú, sino las necesidades de tu alma para llegar al ahora
actual.
Despedir aquel
quien fuiste desde el amor de tu esencia te permitirá recibir y sentir aquel
quien en verdad eres. Un nuevo ser está llamando a tu puerta para mostrarse al
mundo y poder, así, llevar a término lo que viniste a hacer.
El proceso de
tu camino acorta los tiempos de la consecución, porque tu ser, elevado por las
nuevas energías en ti, y tu voluntad, materializarán la Voluntad Divina en tu
ser. Ábrete para darle cobijo y alojamiento, pues nada somos sin nuestra
esencia amorosa, solo vehículo para llevar a nuestra alma a lo más alto de
nuestra elevación.
Siente, ábrete
y acepta porque lo querido se encuentra en la entrega de tu ser y tu vida a las
manos de tu esencia más elevada: el Amor. Dios.
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