domingo, 11 de mayo de 2008

¿Qué edad tienes?

Andando por la vida has ido viendo y sacando conclusiones, y no siempre las más adecuadas y acertadas. Vemos, experimentamos, escuchamos y entonces, debido a los recuerdos de nuestra infancia, nos confirmamos las pautas mentales adquiridas a lo largo del tiempo.
Aprendemos según nuestro entorno, y entonces, depende de las directrices de éste, encasillamos nuestras experiencias en una clasificación u otra. Estas constataciones están basadas desde vuestra condición humana, que ha sido con la cual habéis ido creciendo.
Una de estas pautas clasificadas es el valor que se le está dando a la edad terrenal de la actual vida que os encontráis: “tengo que tener un hijo antes de los 30, a mi edad ya no hay quien me haga cambiar, ya soy viejo/a para hacer según qué cosas, ya soy mayor y nadie se fijará en un/a viejo/a como yo. Yo no, ellos que son jóvenes sí que lo pueden hacer; ya soy mayor y he perdido la memoria. Ya se sabe, hacerse mayor representa problemas de salud y molestias. Mi cuerpo ya no está para trotes como cuando era joven,….”
¿Os suena estas expresiones o de parecidas? Desgraciadamente, debido al valor que el ser humano le da a la forma, se limita, bloqueando su plenitud y acelerando el proceso de envejecimiento.
Todas ellas son expresiones de la vieja energía. El creerte que tú no puedes controlar el tiempo y conectar con tu potencial interior, hace que te deje llevar por la tradición cultural establecida a lo largo de la historia. Si ignoras tus capacidades para ser tú, las creencias de tu entorno guiarán tu proceso, y tu vida quedará limitada por creer que lo que se dice es verdad. ¿Seguro que es la verdad o las creencias conforme tú sólo eres un cuerpo, un ser físico que se va desgastando con el tiempo “porque toca”? Mientras vayas pensando así, tu vida irá perdiendo energía, y tu cualidad irá disminuyendo.
¿Qué edad tienes? ¿Qué edad te gustaría tener? (Pausa).
Si por tu cabeza viene alguna inferior a la que consta que tienes según tu DNI, todavía te crees que tú no puedes crear y vivir al vida según crees que debes de vivirla. Si es así, tu mente se está apoderando de ti. Te estás identificando con ella y tu cuerpo reacciona a estas limitaciones.
La edad tiene que ver con el estado interior en el cual te encuentras. Durante un mismo año no tienes la misma edad. Según te sientes, tienes una edad u otra. Cuando te encuentras mal, hundido, deprimido, sin saber qué hacer, te sentirás envejecido con el grado correspondiente según la intensidad de tus emociones. Cuando ves que todo va bien, hay alegría, ilusión y empuje para hacer cosas, la edad interior no coincide con la que dicen que tienes,
La edad no existe, y no es importante, sólo un reflejo de tu estado interior, por lo tanto, no te identifiques con lo que te dicen según la fecha de tu carné de identidad.
Tú eres un ser intemporal. Existes i siempre has existido, y en cada momento actúas según tu interior. La valoración de la edad terrenal sólo es una limitación más de la persona según el entorno socio-cultural en que vive. ¿Quién dice que a los 65 años uno no está capacitado para continuar trabajando en aquello que le gusta y domina?¿Quien dice que no puedes ser creativo según qué edad tengas?
Cuando se tiene presente la edad de uno, se le está clasificando, limitando y no se le está valorando por lo que es. Tú no eres menos que otro por la edad que puedes llegar a tener. ¿Querrías tener menos años y volver a los 18 ö 25? Es una lástima que hayas olvidado las emociones y los sentimientos de aquellos momentos. Olvidáis con facilidad lo que sentisteis en aquellos años de vuestro pasado. ¿Seguro que queréis volver al pasado y volver a revivir todo lo que vivisteis? Escuchad a vuestro corazón y os daréis cuenta que lo mejor de vuestra vida es lo actual.
Solo existe el presente, y solo el presente es el instante para decidir qué queréis hacer en vuestra vida y qué cualidad le queréis dar. Si no hubieseis vivido el año pasado no hubieseis experimentado la oportunidad de nuevos aprendizajes, y sin éstos, no podríais llegar a manifestar lo que has venido a hacer en esta vida.
Cuando se recuerda el pasado con más alegría que en el presente, es que os habéis olvidado de aprender y fluir de vuestras vivencias. Cuando realmente se produce un aprendizaje, uno ya no quiere volver atrás, porque este nuevo paso dado te da ánimos y coraje para llegar a ser uno mismo. Si no es así, aparece la melancolía, la añoranza y el dolor. Cuando te identificas con la forma, solo sufrimiento y malestar puedes crear en tu vida.
¿Seguro que tienes la edad que dices que tienes? No te lo creas, porque cuando tus sentimientos y emociones aparecen, estás alterando tu edad terrenal.
Tú no tienes edad, y tu potencial es ilimitado. Aquella edad que piensas que tienes, sólo es una designación de tu entorno, pero tú estás por encima de la temporalidad, porqué tú eres un ser multidimensional.
Lo que asocias a una edad solo es fruto de las creencias adquiridas de tu infancia, pero tú puedes desbloquear las limitaciones de lo que se dice según a cada edad. Tú no eres un ser temporal, sino intemporal. Recuerda: existes y siempre has existido. No te identifiques con tu cuerpo. Éste solo es la manifestación de tu interior. ¿Lo ves viejo? Quizás deberías de cambiar la manera de ver la vida y liberarte de tu mente. ¿Te ves joven (sin maquillaje), tengas la edad que tengas ? Puede ser un buen síntoma conforme la jovialidad y la alegría de vivir reside en ti.
Tu edad solo es una limitación más de la sociedad en que se vive. No te identifiques con ella y deja que tu interior, tu corazón, te hable. Él te dirá la verdadera naturaleza temporal que eres y tienes.
Espiritualmente, nadie tiene edad, porqué todos somos inmortales e ilimitados.

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